Un hombre fue arrestado por planear el uso de fusiles, granadas y bombas en un ataque contra la zona de Times Square de la ciudad de Nueva York (EEUU), informaron las autoridades el viernes.
El sujeto, identificado como Ashiqul Alam (22), es residente del distrito neoyorquino de Queens y estuvo meses hablando de sus planes con una persona que resultó ser un agente encubierto, según documentos judiciales.
Alam incluso le pidió al agente venderle armas y fue con él en enero para inspeccionar la zona que iba ser blanco de su ataque, dicen los documentos.
«Repetidamente expresó interés en comprar armas y explosivos para perpetrar un ataque terrorista en la ciudad de Nueva York» en sus conversaciones con el agente encubierto que comenzaron en agosto del año pasado, dicen los textos.
El arrestado tomó videos de Times Square con su teléfono celular y «le explicó al agente encubierto que estaba acechando objetivos potenciales», dicen los registros.
Luego de tratar de comprar un par de pistolas Glock 9mm, el individuo fue detenido el jueves. Está detenido en un centro federal en Brooklyn y comparecerá en breve ante los tribunales. No se informó de inmediato si el acusado cuenta con abogado.
Blanco de ataques
Times Square, una zona teatral y comercial sumamente popular entre los turistas, anteriormente ya había sido blanco de ataques.
En 2010, Faisal Shahzad, un ciudadano estadounidense que había sido entrenado en Pakistán, falló en su intento de detonar explosivos allí. Fue sentenciado a cadena perpetua.
Siete años después, un inmigrante bangladesí, Akayed Ullah, detonó una bomba en un pasillo del tren subterráneo de Times Square. Ullah resultó herido de gravedad y algunos transeúntes recibieron lesiones menores.
Ese mismo año, un hombre que dijo a la policía estar drogado y haber alucinado con voces arremetió con su vehículo contra una multitud en esa zona, matando a un adolescente e hiriendo a 20 personas.
Hay una fuerte presencia policial en Times Square, donde las plazas y aceras están protegidas con barreras de acero para frustrar cualquier posible atentado con vehículos a toda marcha.
