Desde el inicio de la humanidad como la conocemos, se ha especulado sobre el final de la misma. El fin del mundo, el apocalipsis. Se habla de un meteorito, quizá, o una invasión alienígena; aunque la realidad cada día apunta más a que la raza humana (y muchas otras especies) terminarán extintas por los líos ecológicos en los que nos hemos metido. Uno de ellos es el calentamiento global; mismo que el presidente Trump asegura que no existe, mientras otros gobiernos simplemente ignoran.
Faltan 2 grados para que el calentamiento global sea irreversible
Sí, hay algunas iniciativas internacionales trabajando para revertir el calentamiento global; aunque la realidad es que ninguna de ellas está funcionando. Cada día la situación se torna más grave, según un reporte de la ONU.
En el 2015 se estableció el Acuerdo de París; donde se fijó un límite de emisiones de dióxido de carbono por país. El problema es que las proyecciones de emisiones están cada vez más cerca de dicho límite. Si las cosas van como hasta ahora y las proyecciones se cumplen; para el año 2100 la temperatura global habrá aumentado 3.2 grados Celsius. Y sí es grave. Así lo describe el reporte:
Un mundo con 3.2 grados adicionales para finales de siglo provocaría muchos de los efectos extremos y graves para la salud humana, las economías globales y el aumento del nivel del mar que se pronostican en los escenarios de emisiones más altas
Petteri Taalas; secretario general de la ONU aseguró en un comunicado que la ventana de oportunidad para salvarnos está casi cerrada. Si no se reduce el CO2 rápidamente (además de otros gases de efecto invernadero), el impacto del cambio climático será cada vez más destructivo.
¿Estamos contemplando el fin del mundo? Probablemente sí.