Camila Álvarez estudió Odontología en la Universidad de Chile. Como miles de estudiantes chilenos debió tomar un Crédito con Aval del Estado para poder terminar la carrera, cuyo arancel bordea los 600 mil pesos mensualmente. Una vez terminado su paso por la educación superior, la deuda ascendía a $34 millones.
El drama de Camila lo comparten cerca de dos millones de chilenos que tras estudiar con créditos quedan amarrados al sistema, aparecen en Dicom y se ven limitados a la hora de acceder a otro crédito o al sueño de la casa propia. Sin embargo, Camila, con la ayuda de la organización “Demanda CAE”, logró eliminar esta pesada mochila a través de una acción judicial.
¿Cómo logró eliminar la deuda? Juan Pablo Rojas ,coordinador nacional de Deuda Educativa y gestor de Demanda CAE, explica la “jugada” judicial que ha dado resultado en otro 13 casos, y que tiene a otros 50 deudores en el mismo proceso. El escenario tiene que ser el siguiente dice Rojas: «Primero, el deudor tiene que haber dejado de pagar su deuda. En segundo lugar, el banco en cuestión tiene que haber demandado al deudor. Y finalmente, el banco no tiene que haber logrado notificar judicialmente al deudor en un plazo de un año desde la fecha de vencimiento de los pagarés».
Con estos tres requisitos, asegura el representante, se puede iniciar el trámite. “Estos pagarés los llena el mismo banco a través de un mandato en blanco que tiene carácter de irrevocable y justamente es el mandato que nosotros estamos demandando ante la justicia, que es ilegal y abusivo según lo que dice la ley del sernac financiero”.
Ricardo Donoso,de abogado de Nexo BPO, aplaude la jugada para poner en “pausa” los cobros pero explica que esta acción podría eventualmente ser revertida en algún momento. “La deuda CAE no prescribe. Lo que prescribe es la acción ejecutiva, pero no la acción ordinaria. Por lo que los bancos podrían ir nuevamente a demanda”.
Donoso asegura que con estas acciones se “está buscando la quinta pata al gato, lo que me parece excelente, es hacer esto o no hacer nada. Es una buena forma de poder abrir el debate legislativo”. A pesar de esto, el especialista considera que los bancos aún tienen el sartén por el mango al no modificarse la ley. “Hasta el momento, este tipo de demandas han sido aisladas. A los bancos no le duelen 100 millones pero si se masifica todo puede cambiar”.
Aunque esta forma de congelar la deuda sea individuales, «Demanda CAE» sigue adelante con sus demandas colectivas en contra de los distintas entidades financieras. La organización hace un llamado a todos aquellos que tengan deudas con el Banco Estado a firmar en la demanda colectiva antes del 6 de mayo.