Las seis misiones Apollo a la Luna dejaron postales únicas en la Tierra: desde el primer plano al visor de un astronauta, el detalle de cómo las pisadas timbraban la arena lunar y la fotografía donde se muestra a nuestro planeta desde el satélite natural. Ese archivo histórico es precisamente el que repensó un artista chileno, y que gracias a un trabajo de largo aliento produjo imágenes jamás antes vistas.
Nicolás Sánchez tuvo un trabajo colosal. Revisó durante tres años las 8.000 fotografías, audios, películas y comunicaciones por radio del banco de las misiones tripuladas a la Luna. Luego se enfocó en todas las imágenes a color hechas por los astronautas, eligió las que estaban tomadas desde ángulos parecidos y finalmente las montó.
Su resultado fue conseguir imágenes a gran escala del paisaje lunar, donde los detalles de la misión se expanden para situarlos en la inmensa soledad que la misión significó para los humanos que allí llegaron. La mayoría de los paisajes se montaron a partir de 40 fotografías tradicionales.
«Fueron los relatos de los astronautas los que terminaron de armar el proyecto. Estas imágenes de la muestra tienen que ver con esa experiencia ante el vacío cósmico, ante la oscuridad profunda del espacio, son escenas alejadas de la acción, menos científicas, mas humanas y contemplativas», señaló el artista a Publimetro.
Sánchez presentará su trabajo en el MAC de la Universidad de Chile, situado en el Parque Forestal. La exhibición gratuita, y que se extenderá desde hoy, hasta el 9 de junio, cuenta con fotografías de paisajes lunares, imágenes satelitales sobre los sitios del alunizaje, cianotipos, maquetas, varios documentos y videos del archivo de los astronautas.
Según dijo el artista, su apuesta es reunir «lo bello y aterrador». «Fue mucho tiempo de visionado de imágenes, de investigación para comprender cómo estaba organizado el material y de estudio para entender lo que estaba viendo. En los videos que registran todas las acciones que realizaron los astronautas fuera del módulo lunar, se puede ver su genuino impulso ante el asombro, solicitando tiempo a Houston para tomar fotografías, como si eso calmara de alguna manera su desasosiego. Las imágenes de esta muestra quisieran volver a eso», recalca.
