El calor intenso no es el único fenómeno natural con el cual debe lidiar Australia, ya que las inundaciones en el nordeste del país están dejando nada más y nada menos que a los cocodrilos en las calles.
Producto de la enorme cantidad de agua que dejaron las lluvias monzónicas en el estado de Queensland, la ciudad de Townsville se vio obligada a abrir las compuertas del río Ross e inundar deliberadamente dos mil casas.
Sin embargo, lo pero vino después, ya que las aguas que recorrían la ciudad llevaban consigo cocodrilos, serpientes y otros animales silvestres. Inclusive, el gobierno de Queensland envió un mensaje en el que advertía a las personas que tuvieran cuidado con esta especie.
“Si la idea de encontrarse cara a cara con un cocodrilo no basta para disuadirles, antes de ir a jugar en el agua, tengan siempre en la mente que podrían encontrarse chapoteando en medio de los excrementos de su vecino”, advirtió la policía de Queensland.
Los militares salieron a las calles el lunes con vehículos de carga anfibios para rescatar a los habitantes de sus tejados. Las lluvias en Townsvillese llegaron a los 419 mm en un solo día, el domingo, siendo que en un año se registran en promedio 1127,9 mm.