Las víctimas de abuso y violación en los colegios Maristas solicitaron a la Iglesia dejar de financiar las defensas de los responsables de delitos, como el del encubrimiento, indicando que la jerarquía ha guardado silencio en muchos casos.
En cabezadas por Jaime Concha, las víctimas de la congregación Maristas se reunieron con Pilar Ramírez, coordinadora del Consejo de Prevención de Abusos de la Iglesia y designada por Mons. Charles Sciluna en las dependencias de la conferencia Episcopal.
En la ocasión, solicitaron detener el financiamiento de la Iglesia Católica a las defensas de obispos y sacerdotes encubridores o violadores.
«La jerarquía chilena, así como las congregaciones, han guardado silencio y están actuando como verdaderas organizaciones criminales», expresó a CNN, Jaime Concha, denunciante del caso Maristas.
El grupo, manifestó que mientras la iglesia financia abogados, hay víctimas que no se atreven a iniciar acciones legales por no contar con profesionales del derecho, viéndose obligados a ser asesorados por practicantes.
Como se sabe, el Papa determinó que los Maristas se alejen de la autoindagatoria que estaban realizando, y que los antecedentes de la misma fueran enviados a la Congregación para la Doctrina de la Fe, en el Vaticano, para que ésta instruya un proceso canónico.