Al parecer, cada día resulta más arduo llevar a cabo la construcción del muro por lo que un viaje a Irak parecía publicidad positiva para mejorar su imagen en un momento crítico como éste.
Sin embargo, el presidente Donald Trump y sus asesores pueden haber revelado accidentalmente información clasificada en las redes sociales al mostrar las caras de un equipo de élite de Navy SEALs que se ha desplegado en Irak.
Trump, la primera dama, Melania Trump , y otros ayudantes de alto rango de la Casa Blanca hicieron una visita sorpresa a los soldados en la Base Aérea Al Asad en Irak el miércoles.
El Presidente y la Primera Dama se reunieron con tropas, firmaron autógrafos y posaron para fotografías luego de que los titulares de los medios de comunicación reprocharan a Trump por no viajar a zonas de combate durante los primeros dos años de su presidencia.
Sin embargo, para los funcionarios actuales y anteriores del Departamento de Defensa, revelar las identidades y la ubicación de un despliegue del Equipo SEAL viola la seguridad operacional.
De acuerdo con Newsweek, todos los videos publicados en redes sociales -que muestran información sobre qué unidades están desplegadas- casi siempre se clasifican.
«Si bien el comandante en jefe puede desclasificar la información, generalmente la unidad de operaciones especiales no se revela al público estadounidense, especialmente cuando los miembros del servicio de EE. UU están desplegados. Las fotografías y los videos oficiales generalmente difuminan las caras individuales de las fuerzas especiales de operación, debido a la naturaleza sensible de su trabajo», reseñó Newsweek.
Después de la breve visita, cuando Air Force One abandonó el espacio aéreo iraquí, Trump publicó un video en su cuenta de Twitter.
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1078026520021544960
En el vídeo se ve al Presidente dando la mano a los miembros del grupo, que llevaban equipo completo de batalla y gafas especiales de visión nocturna.
Durante la visita de Trump a la base, se detuvo para tomarse una foto con el teniente comandante de la Armada de los Estados Unidos, Kyu Lee.
«La seguridad operativa es el aspecto más importante en los despliegues del personal», declaró a Newsweek Malcolm Nance, un ex especialista en inteligencia de la Armada de los Estados Unidos que tiene experiencia en Irak.
«Los nombres reales, rostros e identidades del personal involucrado en operaciones o actividades especiales, por lo general son un secreto muy bien guardado en una zona de combate (…) y revelarlos de manera casual, a través de una exposición inusual en los medios de comunicación, incluso si se trata del comandante en jefe, resultaría en un auge de propaganda si cualquiera del personal es detenido por un gobierno hostil o capturado por un grupo terrorista», enfatizó Nance.
La Casa Blanca, el Pentágono y el Comando de Guerra Especial Naval aún no han hecho comentarios.