Unas 67.000 imágenes capturadas por la empresa que dio con el submarino argentino en el fondo del Atlántico sur justo un año después de su desaparición son por el momento la única evidencia para determinar las causas de la tragedia, mientras el gobierno insiste que es imposible reflotarlo.
El material fílmico y fotográfico fue registrado por la empresa estadounidense Ocean Infinity, que en la madrugada del sábado dio con el submarino ARA San Juan a 907 metros de profundidad y 600 kilómetros al este del puerto argentino de Comodoro Rivadavia, cerca de la zona en donde se perdió su contacto el 15 de noviembre de 2017.
La compañía, contratada por el gobierno argentino para la búsqueda del sumergible a pedido de los familiares de los 44 tripulantes, entregará el material a la justicia tras su arribo a Comodoro Rivadavia, previsto para el jueves.
«No tuve acceso todavía a la cantidad de fotos y vídeos que tomó Ocean Infinity. No puedo confirmar ninguna hipótesis”, afirmó el lunes la jueza que investiga la tragedia, Marta Yáñez, en diálogo con radio La Red.
“Miraremos detenidamente, no sé cuánto tiempo me llevará ver las 67 mil imágenes. Veremos la posibilidad de traducirlas en 3D», explicó la magistrada, quien adelantó que convocará a peritos de la Armada Argentina y de las querellas de los familiares para analizar el material.
El submarino fue localizado con el casco totalmente deformado, colapsado, implosionado y sin aberturas de consideración, con partes de sus hélices enterradas y restos desperdigados a un radio de 70 metros. En la zona hay cañones submarinos de profundidad irregular.
Imposible reflotarlo
Este lunes el ministro de Defensa Oscar Aguad insistió también en declaraciones radiales que “no se puede sacar la nave, los expertos dicen que es imposible rescatarlo. Además, si se lo intenta corre riesgo de no rescatarla completamente, no son 900 metros de una llanura, es una grieta”.
“Cuando se vean bien las fotos, se va a entender. Por eso fue difícil de encontrar», agregó.
La juez Yáñez, no obstante, confirmó que ordenará “un estudio de factibilidad técnico y económico para ver si es factible reflotar el San Juan”.
«No sería tan irresponsable de ordenar al gobierno el rescate si conlleva muchas pérdidas, económicas y humanas”, aclaró.
Esto no significa que no se vaya a intentar rescatar, pero para ello el gobierno argentino deberá pedir ayuda a otros países o pagar una gran suma con la que compañías como Ocean Infinity o similares se embarquen en la tarea.
Una propuesta que choca con el compromiso de austeridad y presupuestos del gobierno, teniendo en cuenta que Argentina se enfrenta a una crisis económica y una inflación de dos dígitos que ha llevado al gobierno a anunciar medidas radicales para equilibrar el presupuesto e ingresar en un acuerdo de financiamiento con el Fondo Monetario Internacional.
Por otro lado, no hay antecedentes de un rescate submarino a esa profundidad.
La mayoría de los familiares exigen que el submarino sea reflotado para dar sepultura a sus seres queridos y porque creen es la única forma de determinar qué sucedió hace un año.
Los millones
Según destaca Perfil, la empresa Ocean Infinity anunció que cobrará 7.5 millones de dólares por el hallazgo, el submarino estaba localizado a 800 metros de profundidad, a unos 600 kilómetros de Comodoro Rivadavia, donde se había montado el centro de operaciones durante la búsqueda.
Con respecto a reflotar el submarino Oliver Plunket, el CEO de Ocean Infinity, en declaraciones a CNN, aseguró que una eventual operación de rescate de la embarcación sería «arriesgada». «Es un tema relevante en nuestra conversación con el gobierno; un movimiento puede ser catastrófico», señaló.
«Cualquier operación en el mar, en aguas profundas, tendrá un costo. Hasta tener en claro el requerimiento de sacar el submarino, si eso se decide, es difícil tener una idea de cuánto costará. Realmente estaría adivinando porque no hemos visto el lugar por completo aún», dijo Plunkett luego de que se empezara a hablar de que el costo del rescate ascendería a unos u$s 4.000 millones.