Los ministros de defensa de nueve países europeos se reunirán en París este miércoles para fijar las bases de una fuerza conjunta capaz de desplegarse rápidamente en caso de operación militar o desastre natural.
El pasado 25 de junio los jefes de la defensa de nueve países de la Unión Europea acordaron la creación de una nueva fuerza denominada Iniciativa Europea de Intervención, (EII sigla en inglés) la cual fue adelantada por el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
La nueva organización tendrá un presupuesto común y una doctrina que establece sus líneas de acción para operar y planificar de manera conjunta ante contingencias en las cuales la OTAN podría no participar. La agrupación incluye al Reino Unido, Alemania, Dinamarca, Holanda, Bélgica, Estonia, España y Portugal. Finlandia podría sumarse próximamente.
Gran Bretaña siempre se ha opuesto a la idea de crear una alianza Europea de defensa, por temor que esta socave la unidad transatlántica. Actualmente cambió de posición, mientras las disputas al interior de Estados Unidos se profundizan. La entrada del Reino Unido en este proyecto le otorga un valor añadido a la Iniciativa Europea de Intervención ya que es, junto a Francia, la principal potencia militar europea con un presupuesto de defensa de 50.700 millones de dólares y unas fuerzas armadas de 150.250 efectivos, además de poseer el arma nuclear.
La Unión Europea trata de adaptarse al nuevo contexto geopolítico ligado a la voluntad del presidente Donald Trump de reducir la implicación de Estados Unidos en la defensa de Europa.
Sus miembros acordaron establecer en 2019 un Fondo europeo de defensa para desarrollar las capacidades militares de los Estados y promover la independencia estratégica del bloque.
La idea detrás de la IEI es poder montar rápidamente una operación militar conjunta, evacuar a civiles en caso de necesidad o desplegar ayuda después de un desastre natural.