La semana recién pasada el debate en torno a la educación estuvo marcada por la presentación del proyecto de ley «Aula Segura». El texto presentado por el Gobierno, apunta a erradicar la violencia del sistema escolar, otorgando más facultades a directores para expulsar a alumnos involucrados en hechos de violencia graves.
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El proyecto, fue la respuesta de Piñera a la ola de violencia que se ha vivido en los últimos meses en los liceos emblemáticos de Santiago y que ha generado un clima de tensión dentro de la comunidad escolar.
Sin embargo, lejos de terminar con la polémica en los emblemáticos, este fin de semana se sumó un nuevo capítulo de violencia en los colegios. Amanda Opazo, vocera de la Cones, denunció la aparición de una serie de carteles con odiosos mensajes pegados en los frontis de los establecimientos que han encabezado las movilizaciones de los secundarios.
La agrupación detrás de los mensajes de odio se hace llamar «Motín Estudiantil», y según su descripción son la «juventud nacionalista» que actúan «en defensa de lo nuestro». La organización estaría estrechamente relacionado con el Movimiento Social Patriota, organización de ultra derecha que se ha levantado consignas en contra de la migración, el aborto libre y la globalización.
La organización dejó a las afueras del Instituto Nacional un cartel que dice «Aquí se forman mariconcitos». Mientras que en el Barros Borgoño dejaró un lienzo con la consigna «No eres un revolucionario, eres una puta del sistema». Otro de los colegios intervenidos fue el Liceo N1 de mujeres, en la reja del establecimiento se puede leer «Javiera Carrera mujer de verdad, no como tu encapuchada culía».
La organización asegura que son «los estudiantes que se organizaron para limpiar los colegios de terroristas de overol blanco».
