Un avión militar Ilyushin-20 ruso, con 15 tripulantes en su interior, fue derribado durante las últimas horas, culpando Moscú a Israel por ser el responsable de lo ocurrido, y que provocó que la nave cayera a 27 kilómetros al oeste de la ciudad de Baniyas en Siria.
PUBLICIDAD
Según indicó el Ministerio de Defensa del país europeo, el hecho sucedió «por culpa de las acciones irresponsables de Israel en Siria», asegurando que todo pasó cuando cuatro cazas israelíes F-16 atacaban objetivos sirios en la provincia de Latakia.
En ese sentido, señalaron que utilizaron el avión ruso como escudo, siendo este derribado por un misil antiaéreo de sistema S-200 sirio. Al respecto, recalcaron que los pilotos israelíes fueron los culpables por lo acontecido con el Ilyushin-20 ya que «lo colocaron bajo el fuego de la defensa aérea de Siria».
El Ministerio de Defensa remarcó que los cazas de Israel «realizaron deliberadamente esta provocación», considerando todo como acciones «hostiles». En ese punto el portavoz del organismo, el general Ígor Konashenkov, precisó que su país se reserva el derecho a responder adecuadamente.
Las Fuerzas de Defensa de Israel respondieron a las acusaciones, lamentando la pérdida de vidas por parte de Rusia y culparon de lo ocurrido a Siria, «a Irán y a la organización terrorista Hezbolá por este desafortunado incidente».
«Por la noche cazas de las FDI atacaron posiciones de las Fuerzas Armadas de Siria desde donde se preparaba el traslado de maquinaria para la fabricación de armas enviada por Irán a Hezbollah, en el Líbano. Estas armas estaba destinadas a atacar a Israel, y eran una amenaza intolerable», explicaron mediante un comunicado.
