Los animosos saludos de los conserjes de los edificios podría quedar en el pasado. Esa podría ser una de las consecuencias de la tecnología. Ello luego que en Santiago se pusiera en funcionamiento un edificio controlado en su totalidad desde los teléfonos celulares.
El inmueble, ubicado en Rosario Norte 100, en Las Condes, permitirá que los trabajadores puedan ingresar sin necesidad de tener tarjetas, claves u otros elementos para abrir las puertas, sino que sólo será necesario descargar una aplicación en el teléfono que hace que las puertas queden abiertas.
Conserjes no pierden su trabajo
Por otra parte, los invitados recibirán una invitación al celular que les permitirá el ingreso. Con ello, la idea es dejar que los conserjes se preocupen de abrir las puertas y se dediquen exclusivamente a otras tareas.
“Nuestro personal de seguridad que se ubica en el hall de acceso, deja de ser recepcionista y pasa a ejecutar tareas de monitoreo, control y seguimiento de las personas que entran. Así mismo, esto les permite abocarse a otro tipo de tareas complementarias”, puntualiza Cristián Bernales, director ejecutivo de RES Chile S.A, empresa que administra el edificio.
Vehículos
En el caso de los vehículos, aquellos que han sido debidamente registrados por los usuarios, al entrar se detienen segundos frente a la barrera, la cual se levanta cuando el sistema reconoce y autoriza el ingreso.
“Tanto la administración como los usuarios pueden bloquear en forma instantánea y desde cualquier punto que tenga conexión a internet, el ingreso de personas que por diversas razones ya no puedan entrar al edificio”, destacan desde la administración.
Testimonio
Jennifer Mourgues, de Independencia S.A. y con oficinas en dicho edificio, asegura que el servicio “ha sido de mucha utilidad y seguro para nuestra oficina, además nos permite llevar un control de nuestras visitas y mejor coordinación con el tema de la asignación de estacionamientos”.
Claudio Juliá, director ejecutivo de Safecard, enfatiza que las personas hoy esperan mucho más de la tecnología, quieren formar parte de su evolución, desean tener información en tiempo real y controlar el acceso de sus visitas.
“Tenemos el primer edificio de oficinas en el mundo que controla todos sus accesos a través del teléfono móvil. Tanto la aplicación de Safecard, como el software y la electrónica”, concluye Juliá.
