Varias personas fueron hospitalizadas el miércoles tras un tiroteo frente a la sede de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos en Fort Meade, pero ninguna de las heridas era de bala, precisó la agencia de espionaje FBI.
Una camioneta SUV negra trató de entrar sin autorización a terrenos de la agencia poco después de las 7 de la mañana, dijo la NSA en un comunicado. Hubo disparos de armas, pero «los informes preliminares no indican por el momento de que hubiera heridos atribuibles a los disparos», añadió. El FBI investiga el hecho.
El incidente no tuvo vinculaciones terroristas, dijo un funcionario federal que habló bajo la condición de anonimato por no estar autorizado a hacerlo públicamente.
Imágenes tomadas por la prensa local mostraron a las autoridades rodeando a dos personas esposadas después que el vehículo chocó contra una barrera exterior de los terrenos.
Anteriormente, la vocera de Fort Meade, Cheryl Phillips, dijo que una persona fue hospitalizada con heridas de bala.
«La policía de la NSA y la local respondieron a un incidente que tuvo lugar esta mañana en una de las entradas vigiladas de la NSA. La situación fue controlada y no hay amenaza vigente a la seguridad», dijo la NSA en un comunicado anterior.
El presidente Donald Trump ha sido «informado sobre el tiroteo en Fort Meade» y la Casa Blanca dijo que oraba por los afectados, sostuvo la vocera Lindsay Walters.
Una imagen tomada por un helicóptero de la televisora WRC mostró a policías y bomberos en el lugar. WRC dijo que se veían orificios de bala en el parabrisas del vehículo. Se veían materiales manchados de sangre en el suelo.
Después del tiroteo, las autoridades cerraron una autopista en ambas direcciones, lo que provocó grandes embotellamientos en la zona durante la hora punta.
