El resultado de las elecciones 2017 dejó caras alegres en el Frente Amplio. Pese a que no alcanzaron la segunda vuelta y quedaron muy cerca del candidato de la Nueva Mayoría, Alejandro Guillier, las sensaciones en el comando de la candidata Beatriz Sánchez fueron buenas por los números obtenidos en la votación presidencial y también en la parlamentaria, donde, por ejemplo, Giorgio Jackson y Gabriel Boric arrasaron en los distritos 10 y 28, respectivamente, para mantener su cupo en la Cámara Baja.
La felicidad del Frente Amplio fue reflejada por Sebastián Depolo, coordinador de la campaña de Sánchez, quien, en un discurso a las afueras del comando, hizo un positivo balance sobre el 20 por ciento de las preferencias que obtuvo la candidata del sector.
«Es una tarde noche de sensaciones encontradas. Logramos movilizar gente nueva a votar y lo dijimos claramente cuando preguntaban por las encuestas, si muchas personas van a votar era probable que nosotros enfrentáramos a Piñera en segunda vuelta. Damos gracias a los que votaron por la esperanza, el futuro, por una alternativa, a todos los que votaron por el Frente Amplio. Es posible un futuro distinto y ese futuro lo va a liderar el Frente Amplio«, comenzó diciendo.
» Hay una sensación amarga porque quedamos a pocos puntos de haber sido nosotros los que pasáramos a segunda vuelta. Esto no es responsabilidad de los que hoy están acá (en el comando), de los que dejaron la piel, es responsabilidad de una operación comunicacional que se ocupó de decir que no éramos competitivos. Hicimos una campaña honesta, transparente, con las manos limpias, y con pocos recursos. Llegamos para quedarnos, para construir un horizonte distinto de desarrollo en Chile. El Frente Amplio es un nuevo horizonte de desarrollo para Chile«, agregó.
Además, el coordinador nacional de Revolución Democrática, volvió a recalcar en las nuevas ideas que proponía la candidatura de Beatriz Sánchez y en la participación ciudadana que tuvo las construcción del programa: «los opinólogos de siempre dijeron que Chile no quería cambios, pero ofrecimos un programa transformador, un programa que dice claramente ‘no más AFP’, que propone un nuevo sistema de pensiones, que dice claramente ‘fin a la deuda del CAE’. Con esas ideas recibimos un amplio respaldo ciudadano y tenemos un buen futuro por delante».