Un primer semestre para el olvido tuvo minera Escondida, ya que su ganancias se desplomaron un 91%, ya que pasaron de US$527 millones en los primeros seis meses de 2016 a US$50 millones esa año.
La principal causa de esto se debió a la caída del 39% en la producción del metal, provocada por los 44 días que duró la huelga en el yacimiento entre febrero y marzo pasado, la más larga registrada en esa empresa.
En tanto, los ingresos ordinarios asociados a ventas fueron US$ 2.042 millones, un 25% menos respecto del mismo periodo de 2016, cuando alcanzó US$2.739 millones, explicada también por la menor producción.
Otros resultados del balance de la minera, propiedad de BHP (57,5%), Rio Tinto (30%), JECO Corporation (10%) y JECO 2 ltd, muestran que los costos (excluidos costos financieros netos) fueron de US$1.899, cayendo 5% comparado con los primeros seis meses del año pasado, cuando la cifra llegó a US$1.991 millones.