La ministra Secretaria General de Gobierno, Paula Narváez, se sumó a la molestia de Michelle Bachelet quien abandonó rápidamente la catedral evangélica. La secretaria de Estado al terminar el encuentro sostuvo que “nosotros fuimos invitados a un acto de oración por Chile, a un acto de oración por la Patria, y no a un acto de campaña”.
La ceremonia religiosa, donde hubo fuertes críticas a distintas iniciativas del Gobierno en referente a la agenda valórica , Narváez sostuvo que “es importante que en este tipo de actos prime el respeto a las diferencias, prime el respeto a las diversas opiniones que existen en nuestro país y que forman parte de nuestra democracia”.
Asimismo, la titular de la cartera agregó que en el acto “hubo opiniones que son claramente intolerantes y que no se condicen con el debido respeto a la diversidad de opiniones que debe existir en un país democrático como es Chile”.
Consultada sobre si se faltó el respeto a la Presidenta, la ministra Narváez dijo “éste ha sido un acto que se ha excedido en algunos puntos”, reiterando que “como Gobierno siempre vamos a reafirmar nuestro compromiso con el respeto a las diferentes opiniones. El Gobierno de Chile gobierna para todos los chilenos y chilenas, para los distintos grupos y el Gobierno hace lo que debe hacer”.
Finalmente, subrayó que como Gobierno “valoramos las distintas opiniones y las distintas visiones siempre expresadas, esperamos nosotros, en un marco de respeto”.