El 7 de marzo de 2015 se promulgó la ley que crea el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, fecha en que el gobierno de Chile llegó a la suma de 22 ministerios, lo que pone a Chile dentro de los países que cuentan con el mayor número de carteras a nivel sudamericano.
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Actualmente está la intención de seguir aumentando esta cifra, lo que se evidencia con los anuncios de crear el Ministerio de Ciencia y Tecnología, Ministerio de Cultura y las Artes y el Ministerio de Asuntos Indígenas, por parte de la actual mandataria Michelle Bachelet, sumado al anuncio más reciente del Ministerio de la Familia, si Sebastián Piñera logra convertirse en Presidente por segunda vez.
Publimetro hizo un análisis de la cantidad de ministerios de los países más cercanos, y evidenciamos que Venezuela lidera la lista con 29 ministerios, seguido de Brasil (28), Ecuador (23), Chile (22), Argentina (20), Perú (19), Bolivia (18), Colombia (16), Uruguay (13) y Paraguay (12).
Al tener esta cantidad de carteras en el país, surge la duda sobre ¿si seguir creando ministerios es una solución a las necesidades que van surgiendo o se producen más trabas al momento de arreglar situaciones que nos aquejan?
Para Rafael Pizarro, director de la escuela de Administración Pública U. Central, el ir generando instituciones se da por los requerimientos que le surgen a los países, los que pueden ser suplidos gracias a estas atribuciones.
“Existen estos retos ministeriales a medida que se van necesitando, ya que el ministerio tiene la capacidad de articular servicios públicos en pos de algún tema en particular”, explica Pizarro.
Si bien al comparar a Chile con el resto de los países de Sudamérica, no nos encontramos con una cantidad tan dispar en ministerios, la situación es diferente al revisar otros países, como EEUU (15), Alemania (14), Francia (16), México (18), Suecia (12), Rusia (20), India (52), Haití (18) y Liechtenstein (5)
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Al consultar si influye en la eficacia de las políticas públicas la cantidad de ministerios, y lo comparamos con el resto de las naciones, Octavio del Favero, coordinador legislativo de Fundación Ciudadano Inteligente, manifiesta que es difícil evaluar esta variable, y se centra en la importancia que entrega una institución de este tipo.
“La gracia de crear ministerios es darle prioridad a cosas que cuando están insertas en márgenes más generales, se hace complicado que lo tenga”, manifiesta Del Favero.
Para entender por qué tenemos una cifra más elevada que el resto, Rafael Pizarro, añade que al ser un país más joven, tenemos menos temas resueltos, por lo que “los mecanismos de coordinación parecen idóneos”
Desde Ciudadano Inteligente explican que el tener ministerios puede agilizar algunos trámites, pero hay que tomar en cuenta cómo funciona cada uno de ellos, por lo que dan tres elementos:
“Un ministerio pone en primera línea un asunto de relevancia, por lo que sirve, pero es trascendental el funcionamiento de esas instituciones, y para eso se debe tener en cuenta la rendición de cuentas de las políticas, canales de fiscalización y participación ciudadana y creación de un servicio de políticas públicas”
