Un grupo de alrededor de 30 comuneros mapuches se tomó este martes las oficinas de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) en la comuna de Cañete, región del Biobío, para denunciar la violencia en contra de niños y niñas indígenas.
Los distintos Lov y Comunidades en Resistencia de la provincia de Arauco, señalaron en un comunicado que “hemos hecho ingreso a las instalaciones de Conadi en Cañete, en respuesta a la arremetida cobarde y genocida del Estado chileno en contra de nuestra Nación Mapuche”.
En esa línea, aseguran que el Gobierno de Michelle Bachelet “ha extendido su política de ocupación y militarización sin precedentes en tiempos de pseudo democracia, torturando a nuestros pichikeches (niños y niñas en mapudungún) e instalando una política del terror a todo aquel que sea mapuche”.
Asimismo, los comuneros indicaron que con esta política se buscan imponer los intereses de forestales, salmoneras e hidroeléctricas, por sobre las comunidades mapuche.
(Exigieron) la renuncia del responsable político en la zona de todos los hechos represivos descritos anteriormente, el gobernador de Arauco, Humberto Toro (PS)”
Por tanto, exigieron poner fin a la violencia en contra de sus niños y niñas, la desmilitarización de su territorio y “la renuncia del responsable político en la zona de todos los hechos represivos descritos anteriormente, el gobernador de Arauco, Humberto Toro (PS)”.
Carabieros se hizo presente en el lugar para concretar la desocupación del recinto. Tras el operativo se registraron 22 detenidos.