El presidente filipino, Rodrigo Duterte, bromeó el viernes diciendo que los soldados podrían violar hasta tres mujeres aprovechando la ley marcial que impuso en el sur del país, ya que contarían con su apoyo total.
Duterte, que suele emplear un lenguaje vulgar, hizo estos comentarios en broma durante un discurso en una base militar para levantar los ánimos de las tropas, encargadas de sofocar lo que según él es una creciente amenaza del terrorismo islamista.
«Para esta ley marcial, sus consecuencias y sus ramificaciones, yo y solo yo seré responsable. Simplemente hagan su trabajo. Yo manejaré el resto», apuntó.
«Seré encarcelado por ustedes. Si violan a tres (mujeres), diré que lo hice yo», declaró.
Duterte impuso la ley marcial el martes en la región sur de Mindanao en respuesta a los combatientes que arrasaron una ciudad del sur y sembraron el caos agitando banderas negras del grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El presidente filipino dijo que los combatientes estaban planeando establecer un califato para el EI en todo Mindanao, de 20 millones de habitantes, y que la ley marcial era la única manera de aplastar la rebelión.
Rodrigo Duterte, de 72 años, ganó fácilmente las elecciones presidenciales el año pasado presentándose como un candidato cercano a los filipinos, y utilizando a menudo el lenguaje popular plagado de vulgaridades.