El estilo del técnico Guillermo Hoyos en Universidad de Chile se ha transformado en algo ya conocido para el fútbol chileno. Las comparaciones y alabanzas a sus jugadores han marcado su estadía en el club y antes de la «final» ante San Luis en busca de la corona 18 para el club no fue la excepción.
Si antes hizo una analogía entre Gonzalo Jara y Gerard Piqué, y de Felipe Mora con David Villa; ahora fue el turno de comparar a Matías Rodríguez con el lateral derecho de la Juventus, Daniel Alves, al ser consultado por las ausencias de él y Gonzalo Espinoza este sábado.
«Soy un agradecido de los dos. Mati (Rodríguez) es un jugador de selección. Entre Dani Alves y él, no sé con quién me quedo. Espinoza aporta calidad futbolística. Los vamos extrañar muchísimo. Ellos están dolidos por la situación. Pero van a jugar otros chicos que también tienen capacidad», dijo Hoyos.
Por otra parte, el DT de la U dijo que no están pensando en la corona sino que sólo en vencer a los quillotanos. Para él, pase lo que pase en el Estadio Nacional, su elenco debe mantener la mística que ha tenido hasta hoy.
«Nosotros no podíamos prometer el título. Lo que vamos a hacer es tratar de jugar y ganar el partido. Entrar en promesas no sirve. Solo hay que trabajar y así generar cosas. Es difícil llegar a un objetivo, hay que levantarse todos los días y trabajar sobre objetivos», apuntó.
«No debemos dejar de ser lo que somos. La esencia del grupo y del club. Después aprovechar la gran bendición que tenemos. Con humildad y sencillez. Respetando al rival y conociendo también todo lo que tiene», sentenció.
Por último, y ante el alza futbolística que ha tenido el equipo laico en las últimas fechas, el ex seleccionador de Bolivia afirmó que no se atribuye todo el éxito del equipo en esta recta final.
«No soy el salvador de la U. Eso sería soberbia y no está en mi diccionario de la vida. Hay que jugar el partido y disfrutarlo. No hay que dejar nada a cambio por un resultado favorable. Solo hay que hacer lo que venimos haciendo. No hay que dejar cosas por un objetivo. Hay que hacer las cosas por un mejoramiento de la calidad de vida interior. Es un placer ser futbolista», concluyó.