La justicia peruana dispuso la semana pasada la detención preventiva y emitió una orden de captura internacional de Toledo, profesor visitante en la Universidad de Stanford, y quien se presume está en San Francisco, California. Ofrecen 30 mil dólares a quien ayude a capturarlo.
Pese a que Interpol lanzó una alerta roja para ubicar a Toledo en 190 países, Estados Unidos solicitó a Lima que justifique los motivos por los que debe detener al ex mandatario, para que un juez local evalúe pedir su captura.
El Poder Judicial cumplió con recabar los documentos solicitados y los entregó la noche del miércoles a la Cancillería. Este jueves al mediodía, el embajador de Perú en Estados Unidos, Carlos Pareja, entregó esa solicitud ampliada al Departamento de Estado, confirmó una fuente diplomática a la AFP.
El Ministerio Público peruano informó que la solicitud de detención preventiva planteada a Estados Unidos tiene como fin pedir luego la extradición de Toledo. El ministro del Interior, Carlos Basombrío, ratificó la intención.
«Ya se ha iniciado el proceso de extradición y ya se está haciendo todo ese trabajo y siempre con la esperanza de que el pedido del presidente Pedro Pablo Kuczynski, de que sea deportado al Perú, se produzca», dijo a la prensa.
En diálogo telefónico el último domingo, el gobernante peruano solicitó a su par estadounidense, Donald Trump, que evalúe la deportación de Toledo, y se ahorren los trámites de extradición.
El ex representante de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, aseguró que se entregó 20 millones de dólares a Toledo a cambio de ganar la concesión de la carretera interoceánica, que une Perú con Brasil. Él niega los cargos.
Odebrecht, involucrada en una trama de corrupción que ha afectado a varios países latinoamericanos, afirmó haber pagado 29 millones de dólares en Perú a cambio de obras públicas entre 2005-2014 durante los gobiernos de Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016).
Hasta ahora hay tres ex funcionarios del gobierno de García en prisión por supuestamente aceptar un soborno de 7 millones de dólares a cambio de favorecer a Odebrecht con la obra de la Línea 1 del Metro de Lima.
Humala y su esposa Nadine Heredia, quienes cuentan con restricciones para salir del país, están siendo investigados por lavado de activos por financiar presuntamente su campaña electoral con dinero procedente de Venezuela y de Brasil.
Según documentos de la Policía Federal de Brasil, Odebrecht entregó 3 millones de dólares para la campaña de Humala.