Esta semana, el tema de los feriados ha copado la agenda política de Argentina, luego que el gobierno de Mauricio Macri anunciara del fin de los llamados “feriados puente”, una formula que unía los días festivos que caían un martes o un jueves, con el fin de semana.
Esta práctica fue establecida hace seis años por la administración de Cristina Kirchner, para favorecer a la empresa turística.
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Tras una evaluación de las nuevas autoridades, sin embargo, se llegó al convencimiento de que tal medida generaba más problemas que beneficios, pues afectaba la producción nacional y el calendario de los colegios.
En este escenario, Macri firmó por decreto la eliminación de los llamados “feriados puente”, o sea fines de semana que se extendían por cuatro días.
Para compensar, la Casa Rosada elevó el número de feriados “movibles” a lunes o viernes de cuatro a siete. En total, Argentina ahora tendrá 17 días no hábiles en 2017.
La medida, sin embargo, ha generado rechazo en sector kirhneristas y del turismo. Elisa Carrió, diputada de Cambiemos y una de las parlamentarias más mediáticos de Argentina, alzó la voz en defensa del gobierno.
En general, en receso es el único momento en que se usan los DNU. Si convocás a extraordinarias no te viene ni un diputado, están todos de vacaciones”
Junto celebrar la decisión, aseguró que «la gente tiene que trabajar más porque en este país no trabaja nadie”, según publica La Nación, de Argentina.
La parlamentaria, una de las mayores enemigas del gobierno de Cristina Kirchner, también respaldó el mecanismo que utilizó Macri, un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), en vez de esperar que el Congreso regresara de vacaciones. «En general, en receso es el único momento en que se usan los DNU. Si convocás a extraordinarias no te viene ni un diputado, están todos de vacaciones”, afirmó a La Nación.