El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizará este sábado una visita a la sede de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), un gesto de elevado simbolismo, ya que mantiene con la entidad una relación marcada por la extrema tensión.
«El presidente visitará la CIA en la tarde (…). Está entusiasmado de poder agradecer a los hombres y mujeres de la comunidad de inteligencia», apuntó el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, en la red Twitter.
Las relaciones entre Trump y la comunidad de inteligencia se tensaron inmediatamente después de la elección presidencial de noviembre, cuando varias de esas agencias indicaron que Rusia había interferido en la campaña para ayudar al polémico millonario.
Ya en esa oportunidad, Trump había recurrido a Twitter para ridiculizar a las agencias de inteligencia, recordando que «son las mismas» que afirmaban que Irak tenía armas de destrucción masiva para justificar la intervención en ese país.
Pero esa tensión se convirtió en abierta hostilidad después que se filtraran a la prensa unos supuestos documentos de inteligencia que sugerían que Rusia podría chantajear a Trump, ya que poseía videos de fiestas del millonario con participación de prostitutas.
Trump acusó públicamente a órganos de la inteligencia estadounidense de filtrar esos documentos, cuya autenticidad nunca quedó comprobada.
En respuesta a los ataques de Trump, el director de la CIA, John Brennan, dijo a una red de televisión que Trump -en ese momento aún presidente electo- debería tener más cuidado con sus palabras.
«Pienso que el señor Trump debería ser muy disciplinado en términos de qué es lo que dice en público», dijo Brennan, utilizando un tono completamente inusual para referirse al presidente.
En la misma entrevista, Brennan dijo también estar convencido de que Trump no entendía cabalmente «la capacidad, las intenciones y las acciones de Rusia».
Trump designó al legislador ultraconservador Mike Pompeo para substituir a Brennan al frente de la CIA, pero su nombramiento aún depende de la confirmación del Senado.