Unos días antes, el 14 de noviembre, sostuvieron una reunión con el Director General Héctor Espinosa, en el Cuartel General de la PDI.
Los representantes de la institución cumplirán la función genérica de observador internacional, y específica de supervisar el cese al fuego y hostilidades entre las fuerzas militares del gobierno y las FARC-EP. En la práctica, deberán cumplir labores en terreno y visitar los campos de las FARC velando por que se cumpla el compromiso entre las partes.
Tras su llegada a Colombia, los oficiales están participando en un proceso de inducción en Bogotá, tras el cual se les asignarán sus puestos de trabajo y el lugar donde estarán desplegados.
Respecto de la importancia de esta misión, el representante especial del Secretario General de la ONU y jefe de la misión en el país, Jean Arnault, ha señalado que “la Misión busca fomentar la confianza de la población que, por complejo que sea el diálogo político en curso, ha alcanzado un punto de no retorno en la búsqueda de la paz en Colombia”.