El presidente del Gobierno, Matteo Renzi, aseguró que se trabaja para «no dejar a nadie sólo, a ninguna familia» tras el terremoto de 6 en la escala Ritcher ocurrido hoy en el centro de Italia, que ha causado al menos 38 muertos y destruidos pueblos enteros.
Renzi compareció en la sede de Gobierno para anunciar que acudirá hoy mismo a la zona afectada y agradecer a todos los italianos que están colaborando en las tareas de rescate de las personas atrapadas.
«No dejaremos a nadie solo, a ninguna familia. Nos tenemos que poner a trabajar», dijo Renzi en una breve declaración.
El primer ministro italiano dedicó su mensaje a todas las personas que están ayudando para salvar vidas humanas tanto la Protección Civil como el resto de cuerpos que están ayudando.
Hizo referencia expresa a quienes «excavan con sus propias manos».
«Italia llora a sus compatriotas y muestra a todo el mundo las lágrimas y el grande corazón de sus voluntarios, de la Protección Civil y de las instituciones».
Para Renzi, la prioridad es ahora «excavar para poder salvar vidas de entre las escombros».
Por el momento el balance es de al menos 38 muertos y decenas de desaparecidos a causa del terremoto que se produjo a las 03.36 hora local cerca de la población de Accumoli, en la provincia de Rieti.
El epicentro se situó a tan solo 4 kilómetros de profundidad, según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia.
Diez de las víctimas mortales confirmadas son de la zona Arquata, en la región de Las Marcas, y 28 del área que se sitúa entre los pueblos de Accumoli y Amatrice.
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