El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, anunció este jueves los principales ejes del proyecto de ley que reforma la Ley General de Bancos, que ingresará próximamente al Congreso.
Estos apuntan a una serie de aspectos institucionales como el gobierno corporativo del regulador, sistemas de nombramiento y retiro, transparencia y rendición de cuentas, entre otros; requerimientos de capital basados en los estándares internacionales que establece Basilea III (propuestas internacionales de regulación bancaria originadas tras la crisis de 2008); y nuevas herramientas para abordar las situaciones de inestabilidad financiera que pueden presentar los bancos.
Por ejemplo, se propone que el nombramiento del superintendente sea realizado por el Presidente de la República mediante mecanismo de Alta Dirección Pública por un período fijo y su remoción será por resolución fundada y en base a las causales establecidas en la ley.
Asimismo, se establece en el proyecto que los siguientes tres meses al salir del cargo, no podrán trabajar en ninguna institución en que hayan participado directamente en su fiscalización y no recibirán remuneración alguna. En tanto, en los siguientes seis meses deberán informar activamente a la Sbif en el lugar que estén trabajando.
«En Chile tenemos una legislación bancaria que requiere una modernización», sostuvo el ministro, lo que queda en evidencia en el hecho de que «a un banco de afuera los números que le piden no son los mismos de Chile», lo que dijo pudo comprobar cuando fue presidente de BancoEstado.
Añadió que «nosotros tenemos regulaciones en Chile que son antiguas, del año 86. El mundo ha aprendido muchísimo estos años de estándares internacionales que tenemos que usar».
No obstante, precisó que existirá un plazo de seis años de transición para que la banca se adecue a los nuevos estándares en materia de capital.
Consultado por el rechazo del presidente de Asociación de Bancos a que el regulador sectorial sea una autoridad unipersonal frente a la idea de tener uno colegiado, Valdés explicó que en este caso «el comité de verdad que le hace chequeos y balances al superintendente es el Banco Central. Si dejáramos todo el poder radicado dentro de la Superintendencia, para resolución, para pedir capital, tendría toda la razón el presidente de la Asociación de Bancos, en que sería demasiado poder para una persona».
Respecto a las herramientas para dar seguridad a los clientes cuando los bancos enfrenten problemas, el titular de Hacienda afirmó que «la mayor seguridad por lejos es tener bancos bien manejados y en Chile los bancos son bien manejados. La segunda línea de defensa es tener regulaciones buenas, buen capital, harto capital, buenos negocios desde los bancos».
Añadió que si hubiesen problemas más serios, Chile tiene un sistema para garantizar plenamente los depósitos a la vista y los demás depósitos tienen una garantía estatal de poco más de 100 UF, monto fijado en 1986 que se va a actualizar para reflejar el paso del tiempo y el crecimiento económico.
Chile Day
El ministro Valdés se refirió al tema tras exponer sobre los avances de la agenda financiera en el Chile Day 2016, evento público privado que se desarrolla en Londres para destacar los atractivos de Chile como destino para invertir y hacer negocios.
Además de los temas bancarios, comentó los avances de los proyectos de ley de Comisión de Valores y medios de pago; el reciente ingreso de la iniciativa pro productividad que amplía el espacio de inversión para AFP y aseguradoras y propone modernizaciones en materia de custodios internacionales e infraestructuras de pago en el exterior, entre otras materias.
Durante la jornada, la autoridad también sostuvo diversas reuniones con inversionistas extranjeros y, junto al ministro de Obras Públicas Alberto Undurraga, expuso sobre los atractivos y avances en materia de infraestructura ante un grupo de agentes de mercado interesados en esa industria.
«Los inversionistas internacionales siguen viendo a Chile como un país muy serio, que hace sus tareas, que enfrenta los desafíos, no los mete debajo de la alfombra. Entiendo que a algunos les gustaría que no existiera ninguna reforma, pero la realidad es que en Chile los ciudadanos quieren cambios», comentó.
DP/PCP