- El motivo por el que ex Presidente Aylwin será enterrado junto a Eduardo Frei Montalva
- Congreso suspende trabajo legislativo por muerte de ex Presidente Aylwin
- EN VIVO Homenaje el ex Presidente Aylwin en la sede de la Democracia Cristiana
Con homenajes populares encabezados por la Presidenta Michelle Bachelet arrancó este miércoles las exequias del fallecido gobernante Patricio Aylwin, recordado como el mandatario que encabezó la transición chilena tras la dictadura de Augusto Pinochet.
Decenas de coronas de flores y una enorme fotografía de Aylwin adornaban el frontis de la casa del ex mandatario en Providencia donde falleció el martes a sus 97 años por causas naturales y desde donde partió el cortejo fúnebre con los restos de quien asumió, en 1990, el primer gobierno democrático tras los 17 años de régimen militar.
En medio de aplausos, banderas chilenas y pañuelos blancos, el carro fúnebre con el cuerpo del exmandatario avanzó lento por las calles, rodeado de una guardia de más de una decena de motoristas de la Policía chilena.
El cortejo llegó al centro de la capital chilena hasta las puertas de la sede del Partido Demócrata Cristiano (PDC) -del cual Aylwin fue uno de sus fundadores en 1957- y donde miles de correligionarios lo esperaban ondeando banderas de esta tienda política en medio de gritos de «adiós Presidente» y «gracias Presidente».
«Se va un demócrata, lo recordaremos como el hombre que devolvió a Chile de la oscuridad de la dictadura», dijo a la AFP Pablo Hurtado, un joven de 26 años miembro de las Juventudes del PDC.
Tras ello, el carro fúnebre avanzó hasta llegar al palacio presidencial de La Moneda, donde la Presidenta Michelle Bachelet, vestida de un riguroso negro, le rindió reverencia al féretro, cubierto de una bandera chilena, mientras otros cientos de personas aplaudían tras una barrera policial.
Tras su paso por el palacio al cual Aylwin ingresó el 11 de marzo de 1990, el féretro arribó finalmente a la sede del Congreso en Santiago, donde ingresó escoltado por una decena de políticos de su partido y familiares hasta el salón principal, en el que sus restos permanecerán hasta el viernes, cuando será sepultado en el cementerio general de Santiago.
Paz y reconciliación
Abogado de profesión, Aylwin gobernó por cuatro años hasta 1994, liderando la difícil transición desde una dictadura militar -que dejó unos 3.200 muertos y desaparecidos- hacia una renaciente democracia en una sociedad que anhelaba recuperar la paz social.
«Aylwin llegó a la Presidencia empujado por una sociedad que buscaba la paz, que lo eligió para representar el deseo de los chilenos de poner fin a muchos años de confrontación y violencia», escribió Ascanio Cavallo, autor de ‘La historia oculta de la transición’, en una columna en el diario La Tercera.
Con el clamor de los familiares de la víctimas por justicia pero presionado por la presencia de Augusto Pinochet al frente del Ejército prometió justicia «en la medida de lo posible», frase muy cuestionada por partidos de izquierda que apoyaron su mandato pese a ser un férreo opositor del presidente socialista Salvador Allende y su apoyo a la intervención militar que acabó con su gobierno en 1973.
«Entre una dictadura marxista y una dictadura de nuestros militares, yo elegiría la segunda», dijo Aylwin a medios extranjeros un mes antes del golpe que lideró Pinochet.
Pero Aylwin logró la reconciliación luego de pedir perdón a las familias de las víctimas de la dictadura tras recibir en 1991 un informe de la «Comisión de Verdad y Reconciliación» que investigó los atroces crímenes cometidos por la dictadura.
También tuvo un gesto con Allende, a quien le realizó un funeral de Estado en 1990, y también un reencuentro con Hortensia Bussi, su viuda, quien retornó del exilio en 1988 y a quien visitó en varias ocasiones siendo Presidente.
Aylwin logró el apoyo político durante sus cuatro años de gobierno para lograr una transición pacífica, pero además un robusto crecimiento de la economía chilena, en torno a 8%, y la reducción de la pobreza de 40 a 30%.
PUB/NL