Tener brackets es algo para muchos raro y vergonzoso. Porque recuerda muchas veces estereotipos no deseados o ya vividos:
Y nadie se ve bien con ellos:
A excepción de este perro:
Se llama Wesley. Su dueña se llama Molly Moore y su padre posee una clínica veterinaria. Pero apenas le salieron los dientes de adulto al perrito, este no podía cerrar bien la boca (esto se conoce como maloclusión). El cachorro comenzó a perder peso y esto preocupó a Molly.
Entonces a Wesley decidieron operarlo y ponerle brackets, para que los dientes se enderecen y no se enferme más. Así fue como quedó:
Jim, el padre de Molly, fue quien se encargó de la operación. Afirma que raramente realiza esta técnica, cuatro veces al año. Esto le permitirá a Wesley, cuya foto se hizo viral, tener una sonrisa más sana.
En la galería verán la historia de otro perrito que se hizo viral y cuyo video también podrán observar a continuación: