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El presidente de la Fundación Iguales, Luis Larraín rechazó que se entregue a la policía “atribuciones discrecionales” para efectuar el control preventivo de identidad contemplado en la agenda corta antidelincuencia.
En entrevista con La Segunda, Larraín manifestó que “lo que se puede esperar ahora es que el Parlamento tome en cuenta la posición de reconocidos penalistas, de la Corte Suprema, de la Defensoría Penal Pública, del Instituto Nacional de Derechos Humanos y se dé cuenta de que es un error entregarles a las policías la facultad de controlar la identidad”.
Precisando las razones de su desacuerdo con las facultades que se entregarían a las fuerzas policiales, el presidente de Fundación Iguales explicó que «el criterio depende de cada persona, cada carabinero puede tener un criterio distinto. Por lo tanto, las políticas públicas deberían avanzar lo máximo posible hacia no dejar en manos de las policías este tipo de decisiones, sino que dejarlas claramente establecidas en la ley y en este caso se está haciendo exactamente lo contrario. Y eso es peligroso».
En la misma línea agregó que “todas estas atribuciones discrecionales que se le entregan a las policías son vistas con mucho recelo por parte de las organizaciones de la diversidad sexual”.
Como ejemplo del riesgo que conllevan estas “atribuciones discrecionales” conferidas a la Fuerza Pública, Larraín explicó que “todavía está vigente el artículo 373 del Código Penal que castiga las ofensas al pudor y las buenas costumbres, que son cosas que nadie pude definir. Organismos internacionales han insistido a Chile que lo derogue, ya que ha sido históricamente usada para detener a personas trans o parejas del mismo sexo que tienen alguna demostración de afecto en la vía pública”.
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