Este es el Cristo que se instaló en Quilicura para espantar al Diablo

En el mes de la patria, varias son las tradiciones que vuelven a recordarse y una de ellas es la imagen del mítico Cristo crucificado que está instalado en las esquinas de San Luis con Las Garzas, en la población Parinacota de Quilicura. Ello, pues según cuenta la leyenda, esta imagen fue instalada para espantar al mismísimo diablo (ver últimas fotos). 

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“Lo que pasa es que en ese sector de Quilicura, que siempre fue rural existía una familia de hacendados rápidamente comenzaron a tener éxito. De un día a otro, la familia Silva, si no me equivoco, fue ganando riquezas a causa de sus mejores siembras, sus mejores negocios, sus mejores caballos. Entonces, las mismas personas del sector, empezó a decir que el jefe de esa familia había hecho un pacto con el diablo”, explica el concejal independiente de esa comuna, Jorge Godoy, quien además tiene una oficina cerca de ese lugar.

“Hay que recordar que Quilicura tiene un origen rural, entonces, hace más de 100 años, cuando ocurría esto, era muy común que con el tiempo se empezara a decir que por ahí aparecía el diablo”, agrega el concejal Dino Belmar (PPD).

Con el tiempo, a la familia le empezó a ir mal y varios vecinos, motivados por el miedo que volviera a aparecerse el diablo, decidieron instalar la imagen de un Cristo crucificado que protegiera el lugar de la maldad. 

Cristo que perdura en el tiempo

El tiempo pasó y esta imagen comenzó a convertirse en un ícono del lugar. De hecho, cuando este sector que antes era solo siembras se transformó en el punto de unión de las poblaciones Parinacota y Pascual Gambino, la imagen se mantuvo y se transformó en un ícono para los habitantes de la comuna.

“Hay un patrimonio cultural que ha hecho que el lugar se convierta en un sitio de peregrinación”, dice el concejal Godoy.

De hecho, este es un punto de encuentro para ceremonias culturales que tiene Quilicura, como las cicletadas o el cuasimodo. 

“Se generó un patrimionio cultural que la municipalidad decidió mantener”, agrega además el concejal Belmar. 

Maldad presente

Sin embargo, y pese a la existencia de esta imagen, lo más curioso es que hay varias personas que aseguran que el sector está cargada con una mala vibra. De hecho, en esa esquina fue precisamente donde el 11 de septiembre de 2012 el cabo de Carabineros, Cristián Martínez, perdió la vida a causa de un tiro perpetrado por un habitante de la población Pascual Gambino. 

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“No sé si es coincidencia, pero sí, esa zona siempre fue complicada”, dice el concejal Godoy. Y agrega que “ahí habían casos de prostitución infantil y es verdad que alrededor se encuentran las poblaciones más conflictivas de la comuna”.

Pero su par, el concejal Dino Belmar aclara que el origen de esta maldad no tiene necesariamente que ver con la existencia del diablo, sino que con desigualdades sociales de las que las autoridades nacionales no se ha hecho cargo.

“En estas poblaciones hay drogadicción y con un Estado ausente, que no invierte en rehabilitación, es la droga la que termina mandando”, asegura el militante del PPD.

De hecho, agrega que “en algunos casos, hasta la iglesia evangélica o la fe católica ha hecho más que el Estado”.

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“Estas son villas que han sido marginadas pero no hay que caer en discriminar a todas las personas que viven ahí. En esas poblaciones vive gente trabajadora, vive gente esforzada y es verdad que por ahí cerca está la comisaría, pero la policía no ofrece el resguardo que esas personas requieren”, agrega Belmar.

Finalmente, ambos son enfáticos en asegurar que el Cristo no se moverá del lugar al menos por mucho tiempo. “Con el tiempo se ha convertido en un ícono de la comuna” dice el concejal Godoy mientras que su para Belmar dice que “hay que mantener las tradiciones”. 

“Espiritualmente siempre ayuda”, finaliza este último político refiriéndose al Cristo que fue instalado precisamente para ayudar a los creyentes de Dios y del Diablo. 

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