En Iquique se vive con especial solemnidad, como todos los años, un aniversario más del combate naval que inmortalizó al capitán Arturo Prat y a los 140 tripulantes que lucharon y murieron junto a él, el 21 de mayo de 1879, marcando una de las gestas más heroicas de la Guerra del Pacífico y de nuestra historia.
Aunque este año las celebraciones no quedaron fuera de las protestas ciudadanas (ver nota aparte), sin duda, toda la atención en la ciudad-puerto de la I Región de Tarapacá se concentró este año en la corbeta Esmeralda, que en forma de museo naval revivió a partir de este 20 de mayo de 2011, justo 132 años después, tal como era aquella noche previa de 1879 horas antes de su enfrentamiento con el Huáscar.
El Museo Corbeta Esmeralda –realizado gracias al aporte de la compañía minera Doña Inés de Collahuasi-, fue inaugurado por el comandante en jefe de la Armada, Almirante Edmundo González Robles, junto al Ministro de Defensa, Andrés Allamand, además del ministro de Cultura, Luciano Cruz Coke Carvallo; el subsecertario del Trabajo Bruno Baranda; el presidente ejecutivo de Collahuasi, Giancarlo Bruno Lagomarsino; la Intendenta de la Región de Tarapacá, Luz Ebensperger Orrego; el presidente ejecutivo de la Corporación del Patrimonio Marítimo de Chile, Almirante Rodolfo Codina Díaz; el presidente de la Cámara de Diputados, Patricio Melero Abaroa, senadores y diputados de la zona; Comandantes en Jefe de las Fuerzas Armadas y de Orden nacionales y extranjeras, y las autoridades locales, encabezadas por una emocionada alcaldesa Myrta Dubost Jiménez. Para la ceremonia fue trasladada especialmente a Iquique la campaña mayor de la Esmeralda original, que fue tañida al momento de la inauguración, para volver raudamente a Valparaíso.
El museo
Emplazado en la zona portuaria del borde costero de Iquique, la Esmeralda se alza ahora monumental , con sus vivos colores negro y amarillo, sus mástiles y velamen, y según la versión de las impactadas autoridades que subieron a ella , incluso dentro es posible vivir aquella noche y escuchar los murmullos de los marineros, que a esas horas se relajaban y compartían. Todo, gracias al detalle con que los constructores, investigadores y artistas involucrados en el proyecto, dieron vida a la obra museológica. Allí se vive aquella relajada noche del 20 de mayo de 1879, cuando los tripulantes ni pensaban que horas más tarde, su querida embarcación estaría hundida en el fondo del mar con el capitán muerto, tras inmolarse heroicamente sin bajar el pabellón patrio y sufriendo la mortal herida de la poderosa artillería peruana.
La impresionante réplica de la corbeta quedó desde ahora abierta al público, para lo cual debe ingresar al sitio www.museoesmeralda.cl .
Discursos
En su alocución, el Almirante Edmundo González hizo un acucioso repaso de la historia de la nave. “ La Esmeralda es expresión de la adhesión a la gloriosa historia de Chile, que no solo nosotros, los marinos, compartimos con nuestros héroes, sino que toda la ciudadanía rescata y atesora en el legado de valores trascendentes que encarna la Patria entera”, enfatizó .
Por su parte, el ministro Allamand también aludió a la historia y concluyó su discurso con un fuerte: “Hoy ha nacido la séptima Esmeralda de Chile”, haciendo caso omiso a las protestas contra las termoeléctricas (ver nota aparte) , y más tarde dijo “me quedé corto, porque es extraordinaria”.
El director del Museo, Andrés Contador, explicó que el principal atractivo de éste es “poder verlo en su real dimensión y darse cuenta de que aunque era un buque viejo, también era robusto y no tan pequeño como nos parece a todos cuando se habla de él en el combate naval. En realidad el buque completo es la sorpresa”, destacó, e hizo una invitación a todos los chilenos y chilenas a conocerlo (ver video) .
Se espera que la mayor cantidad de chilenos y chilenas pueda visitar la Esmeralda viva, que representa sin duda un nuevo atractivo turístico de la ciudad de Iquique. La gerenta de asuntos corporativos de Collahuasi, Bernardita Fernández, destacó el esfuerzo realizado y manifestó su interés en que “ojalá todos los chilenos y chilenas, y especialmente los niños y niñas, puedan venir a verla”.