Goles son amores. Esta frase suele aplicarse a los delanteros, pero en el caso de la UC, flamante monarca del Campeonato Nacional 2020, también podría definir a su arquero.
Matías Dituro fue el sostén de la UC durante varios pasajes del torneo, donde su valla es la segunda menos batida. Sus atajadas se tradujeron en puntos clave para la consagración.
En la retina está el tapadón a Pablo Aránguiz en el “Clásico Universitario”. De ésos hubo muchos, por lo que el meta argentino fue la figura de la “Franja” en numerosos partidos.
Su importancia no sólo radica en evitar los tantos rivales. Su buen pie es fundamental para la salida del equipo, tanto a ras de piso como con pelotazos largos, virtudes que seguramente harán muy difícil su permanencia en la precordillera, ante los intereses desde el extranjero.
En la otra área, otro transandino fue determinante para la coronación “cruzada”. Las dianas de Fernando Zampedri se pagaron en unidades.
El “Toro” apareció en momentos decisivos, varias veces en los últimos minutos. Imborrable en la memoria será su cabezazo contra Unión Española, para un empate con dos hombres menos.
Por ello, Cruzados, siempre reticente a hacer grandes inversiones, sobre todo por jugadores ya experimentados, se metió la mano al bolsillo. Compró el pase del atacante de 32 años en alrededor de un millón y medio de dólares.
