Cristian Garin (22°) con confianza es otra cosa y esta demostrando que ya la está recuperando después de un irregular regreso en la reanudación del circuito. Es que tras debutar en el ATP 500 de Hamburgo con una aplastante victoria sobre un ex 4 del mundo como Kei Nishikori (35°), este miércoles el chileno avanzó a los cuartos de final salvando un partido que parecía que se le escapaba.
Y su triunfo fue jugando a buen nivel y reaccionando a tiempo. Esta vez el «Tanque» derrotó por 6-2 y 7-6 (3) al local alemán Yannick Hanfmann (103°), un rival que no era sencillo, debido a que en el estreno dio la sorpresa al eliminar a un top ten como el francés Gael Monfils (9°), tercer favorito, y que hace unas semanas alcanzó en Kitzbühel una final ATP.
La primera manga estuvo pareja en el inicio, pero después el nacido en Arica consiguió dos quiebres para desnivelar.
En tanto, el segundo capítulo fue increíble, porque parecía que el criollo lo cerraba fácil al romper el saque del europeo en el cuarto game. Sin embargo, entregó su envío cuando sacaba por el match en el noveno, y luego otra vez en el undécimo, volviendo así los fantasmas de las semanas anteriores.
Pero «Gago» reaccionó. Quebró justo para forzar a un tie-break, el cual comenzó con desventaja de 3-1, aunque se recuperó ganando seis puntos consecutivos y abrochar todo en una hora y 38 minutos.
En cuartos de final de Hamburgo, fase a la que regresa tras el ATP de Santiago en marzo pasado, Garin enfrentará al ganador de la llave entre el lucky loser kazajo Alexander Bublik (56°) y el canadiense Felix Auger-Aliassime (21°) y tomará mayor confianza de cara a Roland Garros, tercer y último Grand Slam de esta mermada temporada.