La preocupación por la llegada de marzo a nivel país también tenía inquieto al fútbol chileno. Y esa intranquilidad por lo que pudiera pasar en estos 31 días se ha hecho realidad, impidiendo el normal desarrollo del balompié criollo.
La séptima fecha del Campeonato Nacional, la primera de este mes sensible, ya sufrió la postergación de un partido. Universidad Católica no pudo recibir a Unión Española en San Carlos de Apoquindo el viernes, ya que no había contingente policial disponible.
Los “Cruzados” no quieren llevarse la misma sorpresa en la Copa Libertadores y, por ello, prefieren prevenir. Deben ser locales ante Gremio el 18, el aniversario de los cinco meses del estallido social, para cuando se esperan movilizaciones, por lo que ya elevaron una solicitud a la Conmebol, por petición de la Intendencia Metropolitana, para reprogramar ese encuentro.
El máximo torneo continental igualmente complica la fijación del duelo entre Colo Colo y Santiago Wanderers en el Monumental, por el certamen doméstico. Válido por la octava jornada, aún no está programado, ya que el “Cacique” debe tener 72 horas de descanso respecto a los cruces coperos donde será anfitrión de Athletico Paranaense, el miércoles 11 a las 19:15, y de Peñarol, el martes 17 a la misma hora.
Ahora, si de partidos sensibles se trata, el domingo 22 debiera disputarse el “Superclásico” entre Universidad de Chile y los “Albos” en Ñuñoa. Hasta el momento, el choque más importante de nuestra actividad sigue en pie.
Para cerrar, el 31 está marcado en rojo en el calendario. Ese día, la selección chilena debutará como local en las Clasificatorias contra Colombia.
“Se tiene contemplado un resguardo especial, extra a lo habitual, para toda la delegación colombiana, por la delicada situación de seguridad en Chile”, avisa Rodrigo Robles, gerente de Ligas Profesionales de la Anfp, sin dar cifras de carabineros ni guardias privados, aunque advirtiendo que sí se contará con grupos de contención. “Respecto de la Fifa, tenemos una comunicación permanente. No nos han hecho ninguna exigencia en particular”, complementa.
En el ente rector, organizador de las Eliminatorias, todavía no es tema. “Ojalá no pase nada”, dicen desde Zúrich. ¿Y si pasa? “La Comisión Disciplinaria ve estas cosas caso a caso”, cierran.
