Este martes se vivirá un Consejo de Presidentes extraordinario en la sede de la ANFP, que marcará el futuro del Campeonato Nacional 2019. La falta de contingente policial para jugar los partidos tiene en ascuas la continuidad del torneo, el cual, incluso, podría darse por cerrado.
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Si en Quilín deciden seguir, una de las opciones es llevar el certamen fuera de nuestras fronteras. En ese sentido, por cercanía, asoman como alternativas lógicas las ciudades argentinas de Mendoza y San Juan.
“Estamos al tanto y solidarizamos con la situación”, indica Jorge Chica, secretario de Deportes sanjuanino, sobre el estallido social que se vive en nuestro país. En cuanto a la idea que ronda entre los dirigentes del fútbol criollo, aclara que “no tengo información al respecto, pero las puertas de la Argentina estarán siempre abiertas para nuestros hermanos chilenos. Está totalmente abierta la opción”.
Respecto a la posibilidad de que las barras bravas crucen la cordillera, no se hace problema. “Es cuestión de ver las medidas de seguridad. Nosotros tenemos un sistema que se llama Tribuna Segura, así que hay otros estamentos del Gobierno que empezarían a funcionar ahí”, explica el funcionario provincial.
«Sería un placer, está la mejor disposición»
Tal como las del estadio San Juan del Bicentenario, las puertas del Malvinas Argentinas están abiertas. “Todo lo que nosotros podamos acomodarnos para que se juegue, sería un placer, claro que sí, desde luego”, avisa Federico Chiapetta, subsecretario de Deportes de Mendoza.
Respecto a la seguridad, tampoco se hace problema. “Estamos acostumbrados, hemos tenido muchos partidos de riesgo. De hecho, River y Boca jugaron la Supercopa 2018 acá, y vinieron las dos barras bravas desde Buenos Aires. Tenemos experiencia y se tomarían todos los recaudos necesarios, seguramente habría coordinación entre las policías y la aduana también haría su trabajo”, advierte la autoridad provincial.
Eso sí, el funcionario mendocino explica que “este martes tenemos una visita de la Conmebol, por la Copa América 2020, porque vamos a ser sede. Veremos si nos sugieren remodelaciones”. Por último, cuenta que “tenemos algunas obras pequeñas de mantenimiento, que las hacemos en el verano, en el receso de nuestro torneo, muy probablemente en enero, pero está la mejor predisposición”.