En medio del exitoso ciclo de Jorge Sampaoli en Universidad de Chile, Valber Huerta hizo su irrupción en el fútbol profesional cuando apenas tenía 18 años. Pese a ser una de las grandes promesas de la cantera de la U, el destino lo terminaría colocando en Universidad Católica, tradicional rival de los azules en el que el melipillano ha alcanzado su plenitud futbolística. Pero entremedio de dichas etapas hubo una vuelta larga, la que incluyó un paso por Colo Colo, el otro grande del país.
En entrevista con El Gráfico Chile, Huerta habla justamente de esa vuelta larga que hoy le permite ser uno de los pilares en la sólida campaña 2019 de la UC de Gustavo Quinteros. Pese a arribar a comienzos de año con cartel de alternativa para la inamovible dupla de centrales compuesta por Germán Lanaro y Benjamín Kuscevic, el mundialista sub 20 con la Roja en Turquía 2013 llega al cierre de la temporada como el defensa franjeado con más minutos.
¿Te imaginabas estar así de consolidado en la UC a esta altura de tu primer año?
A principios de año era un reto importante, llegar al campeón y con el desafío mayor de disputar un puesto con Benja y Germán, que en el torneo pasado lo habían hecho muy bien. Por distintos motivos se me ha dado la oportunidad, he tenido la confianza de los compañeros y del entrenador. Gracias a Dios se me han dado las cosas y he podido rendir.
¿Sentías que partías desde un poco más atrás en esa pelea por ser titular, asumiendo que Kuscevic y Lanaro venían de cerrar un muy buen 2018, y que, por lo mismo, arrancaban con ventaja?
Así fue. Si no me equivoco, el año pasado también fueron la defensa menos batida, son grandes jugadores, pero creo que el compañerismo y la confianza que me dieron de entrada, todo el equipo en general, pero en especial ellos dos, ha sido muy importante. Han sido muy abiertos conmigo y hemos dado una disputa que nos ha hecho crecer como jugadores a los tres. En el club confiaron en mí y tenía que demostrar que era un aporte. Se me dio la oportunidad de jugar en la Copa de Verano y de ahí tenía que seguir demostrando a lo que venía. Por distintas situaciones se ha dado la oportunidad de jugar y he intentado demostrar en cada minuto mi capacidad.
¿Ahora te sientes distinto, sabiendo que eres el defensa con más minutos en la campaña de la UC en el 2019?
Obviamente. Y es lindo estar en esta posición, porque creo que se han hecho bien las cosas. Haber estado en la mayoría de los partidos me hace sentir un jugador importante y así me lo hacen sentir también mis compañeros.
Esa confianza es tal, que tu aporte no sólo se da en lo defensivo. También destaca esa faceta de ser factor ofensivo con tu salida desde el fondo…
Venía desde el año pasado en Huachipato, de trabajar con un entrenador al que le gustaba mucho salir jugando y a Gustavo también le gusta esa fase del juego. Es una situación en la que me siento cómodo, sobre todo por el perfil. Cada vez que me necesitan como salida por ese lado, trato de hacerlo de la mejor forma.
¿Sientes que tu buen momento en la UC y esas características distintivas de tu juego te pueden llevar a la Selección?
Sí, pero ahora estoy netamente enfocado en Católica, en poder seguir haciendo las cosas bien y consiguiendo cosas grupales. Si se llega a dar lo de la Selección, sería fantástico, pero si no es así, habrá que seguir trabajando en los objetivos que tenemos como club.
Este presente se da después de una vuelta larga en tu carrera. ¿Qué análisis haces en este buen momento sobre el camino que tuviste que recorrer desde que emergiste en el fútbol profesional en la U?
Siempre lo he dicho: todas las situaciones por las que pasé me han hecho crecer como persona y como jugador. Viví distintas situaciones durante los primeros años de mi carrera como profesional que, a la larga, me han hecho ser lo que soy ahora. Tal vez tomé decisiones apresuradas, no sé si erróneas, no sé si lo volvería hacer, pero le veo el lado positivo, me han hecho crecer y me permiten ser lo que soy ahora.
A los 21 años, sin estar consolidado en la U, te fuiste al Granada de España. ¿Cómo fue esa experiencia en Europa?
Estuve un año y medio, fui a la filial con la idea de progresar y llegar al primer equipo. En el primer año jugué mucho, pero me costó entrar por el tema de las lesiones. Venía de una lesión grave, tal vez el cambio de ritmo y el estado físico me pasaron la cuenta. Después llegó un nuevo entrenador (José Miguel Campos) con el que jugué muy poco en los últimos meses y ahí tomé la decisión de volver.
Hoy estás en la UC, un club que se define como formador. ¿Les recomendarías a los jóvenes del equipo salir al extranjero a temprana edad?
No, pero acá en Católica las cosas se manejan de forma distinta, creo que es muy bueno, porque los jóvenes se identifican mucho con el club y esperan ser un real aporte, poder ser protagonistas dentro del equipo y después de eso recién partir. Creo que es la mejor decisión.
Estuviste en otros clubes formadores como la U, Huachipato y Colo Colo. ¿En la UC es muy distinto el trato a los jóvenes?
Acá los jugadores jóvenes se sienten importantes dentro del equipo, mucho porcentaje del plantel es formado en casa y eso es lo que los lleva a sentirse parte importante, sentir que pueden ser reales protagonistas dentro de equipo en el presente o en el futuro cercano, para ya luego tomar la decisión de salir.
¿Sientes que perdiste un par de años de tu carrera al tomar la decisión apresurada de partir a Europa?
No me gusta entrar más en detalles, pero fueron situaciones que se dieron en el momento, distintas posibilidades. Tal vez no fue la opción más adecuada haber tomado esa decisión, pero si me hubiese quedado en Chile, no sé qué hubiera pasado. Me podría haber ido a préstamo, me podría no haber ido bien y al final no hay certezas de lo que podría haber pasado. Veo el lado positivo, he dado una vuelta muy larga y a mis 26 años estoy muy feliz donde me encuentro ahora, en este caso, en Universidad Católica.
Lo dices y se te nota: estás feliz en la UC. Más allá de lo deportivo, que es evidente, ¿qué hay en este equipo que hoy te tiene atravesando un muy buen momento?
Acá en Católica creo que hay una familia más que un club deportivo. Todos se preocupan por ti en un cien por ciento, desde las personas que hacen el aseo hasta los que te ayudan con la ropa de entrenamiento. Todos vamos por el mismo objetivo, todos luchan por seguir creciendo como personas o jugadores, o lo que sea, y por seguir consiguiendo objetivos deportivos.
¿Y eso es muy distinto a lo que se vive en los otros clubes en los que has estado?
Sí, porque desde que llegué acá me he sentido bastante cómodo, es como si llevara mucho más tiempo. Ha sido un año bastante bueno y podría ser mucho mejor aún. Vamos a seguir trabajando para conseguir los objetivos.
Tomando en cuenta que te formaste y debutaste en la U, y que después tuviste un paso por Colo Colo, ¿fue tema para ti el cómo te iban a recibir en la UC tus compañeros, pero, sobre todo, los hinchas?
Se dio el pensar qué iba a pasar, pero en ningún momento me han comentado que jugué en tal equipo, al contrario. Sí creo que fue factor comenzar jugando desde el principio y demostrar que quería ser un aporte, eso ayudó mucho a que la gente confiara en mí y mis compañeros también. Es la única forma, demostrando en la cancha y poder ganarte así el cariño y el respeto de todos.
O sea, ¿pensaste que podía ser distinto?
De todas maneras, pero uno en este tema es profesional, se tiene que dedicar al cien al club al que pertenece. No fue tema, pero sí hubo ese pensamiento de cómo me van a recibir y cómo me voy a adaptar. Ha sido de la mejor forma, en todo sentido.
¿Qué tan relevante es eso de la «familia» en la UC? No eres el primero que utiliza ese concepto…
Es un plus importante para uno como jugador sentir eso y más desde el primer día. Desde que llegas a Católica, el portero te recibe con una sonrisa, la gente de la cocina con el desayuno está esperándote bien, está todo el equipo reunido desayunando, nos vamos juntos al entrenamiento, siempre el equipo está compacto, no hay nadie que se salga de ese grupo. Eso nos ha llevado a lo que somos hoy en el fútbol chileno.
¿El jugador de fútbol necesita ese trato más afectuoso de parte de un club?
Creo que eso va más en lo que le gusta a cada uno como jugador, pero acá todos estamos en la misma sintonía, todos queremos lo mismo, no veo que haya alguien que quiera algo distinto, se nota en cada partido que todos queremos luchar por el mismo objetivo.
Tienes un contrato largo con la UC. ¿De qué manera te proyectas en el club?
Me queda mucho tiempo aún, ha comenzado de gran forma y espero que siga siendo igual o mejor. El equipo está para pelear cosas importantes, si bien nos quedó la espinita clavada de los torneos internacionales durante este año, creo que el proceso del profe Gustavo ha dado frutos y siento que con el equipo y el cuerpo técnico que tenemos, podemos hacer cosas importantes en lo que viene de ahora en adelante.
Considerando que la mitad de tu pase le pertenece a un club inglés, en este caso, el Watford, ¿está en tus planes tener una segunda oportunidad en Europa?
Sí, pero lo tomo del mismo modo que el tema de la Selección: estoy solamente enfocado en seguir cumpliendo acá y ya después se verá más adelante lo que pueda pasar. Ahora me mantengo netamente enfocado en Católica.