El ataque al gerente de Azul Azul, Felipe de Pablo, desató el enojo del presidente de la concesionaria que controla el fútbol de Universidad de Chile, José Luis Navarrete, quien señaló este miércoles que «estos hechos delictuales son repudiables«.
«No nos dan miedo, seguimos con un compromiso personal e institucional para sacar a la U adelante. Son una lacra estos delincuentes que se visten de hinchas», dijo el timonel azul con mucha rabia.
Luego continuó diciendo que «estamos enojados con su actuar, han traspasado todos los límites deportivos. A mí no me van a amedrentar, todo lo contrario, estoy muy alerta y muy deseoso de salir con éxito del gran desafío que tengo«.
El dirigente estudiantil, además, criticó al capitán del equipo, Johnny Herrera, quien señaló hace un tiempo que se debería levantar el derecho de admisión a algunos hinchas azules que tienen prohibición de asistir al estadio.
Ante eso, Navarrete dijo que Herrera «puede manifestar su opinión libremente, pero la opinión de la institución la doy yo. No le vamos a abrir las puertas a un sector de la barra, no lo vamos a hacer, tenemos miles de hinchas en todo chile. Tenemos que erradicar estos grupos aislados, ellos le están haciendo mucho daño al fútbol«.
Finalmente, el ex mano de derecha de Carlos Heller señaló que «dado la sensibilidad del momento y el escenario que tenemos, hoy las fuerzas de orden público están alerta a que algún hecho ocurra cerca del CDA. Esto pasó fuera, no es nuestra responsabilidad, pero sí estamos atento a todo lo que pase en nuestro recinto».