Julio Barroso respira tranquilo y es feliz en el Monumental. El defensa, uno de los ídolos en los tiempos recientes de Colo Colo, no lo pasó bien en el último mes, especialmente por lo larga que fue la negociación para renovar su contrato con el Cacique, el cual finalmente se materializó por dos años.
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El Almirante se integró a la pretemporada bajo el mando de Mario Salas y tiene claros sus objetivos para el 2019: revancha tanto en lo personal como en lo grupal tras un “duro” año, con la meta de ser un aporte para el nuevo entrenador y ganar un torneo, tal como manifiesta en esta extensa entrevista con El Gráfico Chile. El zaguero de 33 primaveras no quiere repetir lo del 2018, donde los albos se quedaron con las manos vacías.
Después de una larga negociación, renovaste contrato por dos años, que era tu deseo y la petición de Mario Salas…
Lógicamente, para mí es una alegría inmensa. Ya hace un tiempo que puedo ser parte de este lindo club y después de una negociación dura que se dio, salió todo bien y ahora a prepararnos para un nuevo desafío.
¿Era un contrato por dos años el que esperabas para seguir en Colo Colo?
Sí, ésa era un poco la traba que teníamos en la negociación, pero bueno, en este caso Marcelo (Espina) fue muy importante para destrabar la situación y le agradezco mucho por el valor que me brindó en esta ocasión, más que nada por todo lo que me tocó vivir. Uno es agradecido porque me permitió volver a estar y ser parte de esta historia.
Por los años de renovación del contrato y tu edad, ¿te gustaría retirarte en Colo Colo?
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En el fútbol es difícil proyectarse para el final de la carrera, uno no sabe qué va a pasar. Si bien puedes tener planes, éstos varían por muchas cosas, porque tal vez no estás al nivel, porque viene un entrenador y no quiere que continúes. Existen un montón de factores que se presentan para armar un futuro. Lógicamente, uno siempre pretende lo mejor. Hoy te digo que sí, que me gustaría, pero más adelante no sabría qué va a pasar en el club. Lo que más me interesa es disfrutar el tiempo que tengo y de a poco ir pensando qué es lo que va a continuar y cómo.
Cuando se dio a conocer tu renovación, los hinchas de Colo Colo manifestaron una alegría inmensa. ¿Cómo recibes ese cariño que te han brindado desde que estás en el club?
Es bien particular mi relación con el hincha, el cariño. A veces uno reflexiona todo lo que vivió en el club, que me tocó llegar en una situación mala, donde hacía cinco años que no se conseguía nada y, gracias a Dios, se logró ser campeón en el primer torneo. Uno no lo sabe describir, pero para mí fue muy importante el apoyo que me brindaron, sobre todo el año pasado, que en lo personal no fue bueno. Es como una retribución, creo yo, al saber que yo me brindé en ese momento malo, un respaldo para continuar. Iba a ser doloroso partir, pero era entendible, porque los clubes toman decisiones, arman proyectos y también iba a saber entenderlo. En el caso de que no se diera la renovación, sólo me iba a quedar alentar desde afuera, pero la historia es otra y tenemos un nuevo tiempo para yo disfrutarlos a ellos y ellos disfrutar del equipo.
¿Te sientes cómodo en Colo Colo?
Sí, claramente estoy muy cómodo. Han pasado muchos años y es difícil pensar en salir, aunque siempre va a estar esa posibilidad por los motivos que dije antes, pero uno siente que Colo Colo es su casa y yo quiero disfrutar hasta el momento que decidan lo contrario en el club. Sé que tengo que arrancar desde cero, firmé una gran responsabilidad, un gran desafío y pretendo estar a la altura, prepararme para tener revancha.
En los dos sentidos. En lo grupal, porque tenemos un desafío de volver a conquistar un título, y en lo personal, porque uno se mal acostumbra a jugar tanto y el no haberlo hecho el año pasado como en otras ocasiones, es un poco doloroso para mí. Por eso digo revancha, porque uno quiere estar presente, brindar su granito de arena para que otra vez volvamos a estar en lo más alto de cualquier objetivo que tengamos.
Las lesiones y las diferencias con Pablo Guede marcaron tu 2018…
A nivel grupal, tuvimos un año donde no conseguimos nada. Somos conscientes que después de cuatro años anteriores donde nos tocó ganar la Copa Chile, la Supercopa y el torneo, no nos llevamos ninguna de las competencias donde estuvimos. Es una revancha colectiva y todos debemos aportar en lo individual con Mario (Salas). Seguramente estas renovaciones hacen bien para la cabeza y todos sabemos la idea que él pretende con nosotros.
¿Fue muy duro el 2018 en lo personal?
Sí, lógico. Fue duro por muchas cosas, porque me tocó enfrentar varias situaciones, pero lo tomo como un aprendizaje. Creo que todo en el fútbol es para aprender, nunca las experiencias vividas son las únicas, siempre vas a experimentar algunas nuevas y servirán a futuro para cuestiones donde uno siga ligado a esto. Si bien uno sufre en ese tipo de circunstancias, no deja de pensar que puede modificar, cambiar y mejorar, y trato de enfocarme en eso.
¿Cómo han sido estos primeros días con Mario Salas?
No es porque Mario hoy esté trabajando con nosotros, sino que al haberlo visto y enfrentado en otras ocasiones, yo manifesté cuando Católica salió campeón que era uno de los equipos que mejor jugaba. Tiene intensidad, una linda idea de juego y claramente eso es lo que va a inculcar. Es muy detallista en cada situación y seguramente el crecimiento de cada uno va a permitir lograr lo que él pretende, que es ser intensos y tener el control del partido.
¿Te has llevado alguna sorpresa en estos días con su trabajo?
La verdad es que no, porque los más grandes ya hemos tenido varios entrenadores con el mismo nivel de intensidad, aunque cada uno tiene su estilo. A mí me tocó en el pasado con (Eduardo) Berizzo, así que sorpresa no, aunque lo bueno siempre es aprender algo nuevo, estar preparado para recibir, nunca hay que decir que uno lo sabe todo. Está bueno aprender lo que él pretende en la parte defensiva y qué es lo mejor para el equipo.
Parte defensiva donde no solicitó más refuerzos…
Sabemos que él tiene claro el concepto de jugadores que va a utilizar, a quienes puede poner en la zona defensiva. Si él lo dispuso de esa manera es porque tiene claro lo que necesita. Sabemos que tenemos una responsabilidad importante hacia él por confiar en nosotros y al que le toque jugar, debe brindar lo mejor, sabiendo que apostó por nosotros.
Hay un plantel experimentado, pero ahora sí están llegando refuerzos más jóvenes. ¿Qué te parece esa situación?
Es una mezcla que uno la puede ver en el último campeón de América, que es River Plate. No hay que ir tan lejos para darse cuenta de que hay que parar un poco con eso de los jugadores grandes, porque ellos también los tienen y fueron campeones. Se necesita un poco de todo y me parece que en este nivel de intensidad, con lo que dispone Mario, vamos a servir todos. El que esté preparado va a jugar.
¿Sientes que se critica mucho que Colo Colo es un equipo con muchos jugadores de experiencia?
No digo que no se critique, cada uno puede dar su opinión, solamente digo que trato de mirar fútbol, al igual que mis compañeros, y la realidad es que todos los equipos están formados por jóvenes y experimentados. Ojo, no tiene que ver con la edad, porque hay jugadores que tienen mucha y no tienen mucho recorrido en grandes clubes. No son lo mismo los años y la experiencia, sino los momentos que viviste, las circunstancias, los torneos internacionales. Hay chicos que tienen 23 años y también ya los vivieron. Son opiniones particulares, no critico que se opine, pero sí hay que saber que un equipo se conforma con diferentes futbolistas, con distintas características, para que el técnico piense lo que es mejor para cada momento.
Tienen tres torneos en este 2019, con la Copa Sudamericana como desafío internacional. ¿Cuál es el objetivo para este año?
Primero, nuestra clave es la pretemporada, para agarrar la idea de Mario cuanto antes. Mientras más avance, más vamos a ir aclarando los objetivos, aunque sabemos que este año tenemos que conseguir un título. A medida de que se presenten los torneos y veamos cómo arrancamos, se irá viendo, pero lo importante es hacer una buena fase de pretemporada, física, técnica y táctica, y, a partir de eso, el equipo va a tener la confianza para darse cuenta de para qué estamos.
