Marcelo Ríos tuvo un regreso feliz a las canchas desde su retiro en 2003, tras imponerse en un partido de exhibición a Nicolás Lapentti por 6-4, 5-7 y 11-9, en un duelo marcado por las bromas y viejos recuerdos.
Tras el encuentro, el ex número uno del mundo aseguró que «después de tanto tiempo retirado, volver a jugar en Chile es emocionante. Tener un estadio lleno tras casi diez años sin jugar es hermoso. Felicito a los que organizaron el evento, sé que se hizo con mucho cariño. Gracias a mi familia. Pude tener a mi señora y a mis seis hijos, a mis padres. Lo más bonito que podía hacer era demostrarles lo que hacía su papá antes».
Al ser consultado por la seriedad con que jugó ante el ecuatoriano, Ríos expresó que «a mí me cuesta no tomarlo en serio. La gente entiende que cuando ya no es tan en serio se pone aburrido. Yo me preparé lo que más pude. Me gusta jugar y me gusta jugar bien. Yo creo que a Nicolás también».
Finalmente, el zurdo de Vitacura echó por tierra la opción de volver al profesionalismo. «Yo no he recibido el wild car para jugar. Era una de las opciones que yo había tomado, porque me había preparado bien, me sentía bien. Lamentablemente no se dio. Creo que no va a haber próxima y ojalá sigamos haciendo exhibiciones. Hay Marcelo Ríos para rato«, cerró.