Todo le costó al Independiente de los chilenos frente a Patronato por la octava fecha de la Superliga argentina. Cuatro jugadores se lesionaron en el transcurso del partido y el Rojo tuvo que aguantar casi todo un tiempo con uno menos porque se le habían agotado los cambios.
A pesar de todo, los dirigidos de Ariel Holan dieron una muestra de carácter, dejaron atrás la dolorosa eliminación de Copa Libertadores a manos de River Plate el martes pasado y superaron por 2-1 al conjunto de Paraná a domicilio.
Los de Avellanada salieron con Francisco Silva y Pedro Pablo Hernández en el once titular. Silva para cortar circuitos rivales y Hernández para manejar la pelota. A los 40′ del primer tiempo el Gato no pudo seguir y le tuvo que ceder su lugar a Nicolás Domingo en mitad de terreno. El Tucu se mantuvo en cancha durante todo el partido, aunque también quedó lastimado.
Según el parte médico oficial, el mediocampista formado en Universidad Católica sufrió un esguince de rodilla derecha, mientras que el ex volante de O’Higgins de Rancagua sufrió una contractura de gemelos en la pierna derecha.
Los goles llegaron en el segundo tiempo. A los 67′, Martín Benítez capturó un rebote a la entrada del área tras un córner y disparó. Su remate se desvió y dejó descolocado al arquero Sebastián Bertoli. Seis minutos más tarde, Emmanuel Gigliotti aprovechó una pifia de la zaga local, gambeteó al arquero y definió con clase para poner el 2-0. El Rey de Copas tenía el partido en el bolsillo, pero a los 83′ Renzo Vera puso el descuento y Patronato asustó hasta el pitazo final.
