«Vamos a momificar a Paredes en el Monumental». Esa fue la promesa sobre la renovación de Esteban Paredes que lanzó Aníbal Mosa tras ganar la Supercopa. En ese momento, mientras levantaba la primera copa del semestre, el delantero estaba en plenas negociaciones para extender su estadía en el Estadio Monumental, que llegaba a su fin tras el Torneo de Transición.
Precisamente, mientras conversaba con Blanco y Negro, el capitán de los albos recibió una oferta de Peñarol y complicó todo el panorama. Sin embargo, con la propuesta de los charrúas sobre la mesa, Blanco y Negro apuró las tratativas, escuchó las demandas que tenía el capitán de los albos para renovar su contrato y presentó una contrapopuesta. El delantero, a sabiendas de su condición de referente, pidió extender su vínculo por dos años, hasta fines de 2019, y seguir ligado en funciones técnicas tras su retiro.
Pese a que los dirigentes tenían reparos en este último punto, ya que querían que Paredes fuera Embajador y rostro de Colo Colo una vez colgado los botines, llegaron a un acuerdo y este miércoles, luego de extensas reuniones entre el representante del jugador y los dirigentes, firmaron la renovación de contrato por dos años más, tal como quería el jugador.
«Estamos en total acuerdo, firmó un preacuerdo y ahora será presentado al directorio de Blanco y Negro. Es jugador de Colo Colo por dos años más, las condiciones son óptimas para las partes y Esteban (Paredes) seguirá en el club«, dijo Sergio Morales, agente del capitán, tras la reunión que selló la renovación del contrato.
Además de la extensión del vínculo, el capitán de los albos tendrá un leve aumento de sueldo, llegando a 28 millones de pesos mensuales, y tras su retiro ejercerá funciones técnicas en alguna de las categorías menores del club, aunque primero será embajador y seguirá el mismo camino de Luis Mena. Colo Colo tendrá Paredes para rato.
