Minuto 87 y Gonzalo Villagra silencia el estadio Monumental. Una mala salida del portero Álvaro Salazar permitió que el volante cabeceara para decretar la igualdad definitiva a un tanto entre Colo Colo y Deportes Antofagasta, dejando a los albos en el segundo lugar y sentenciando la suerte de Pablo Guede.
Tras el pitazo final del árbitro Patricio Polic, el DT se retiró con su botella de agua mineral en la mano y desde distintos sectores del recinto deportivo comenzaron los insultos e, incluso, hasta algunos proyectiles le cayeron al argentino.
Pero, ¿por qué era tanta la molestia del técnico? Durante todo el compromiso, los fanáticos del Cacique no estaban conformes con el rendimiento del equipo y menos aún con los cambios del argentino. Tras un inicio prometedor y el gol de Octavio Rivero, Colo Colo bajó considerablemente su rendimiento. Es más, en el segundo tiempo, los albos se vieron superados por los Pumas y los hinchas constantemente recriminaron al DT.
«Ratón, vende humo, saca el equipo adelante, haces mal los cambios», fue lo más suave que se escuchó desde las gradas del Monumental contra el técnico. Por eso, mientras el público se retiraba cabizbajo, los improperios seguían hacia Guede, varios pedían su salida e, incluso, comparaban la situación con la que vivió su compatriota Diego Cagna hace un tiempo atrás.
Ya en conferencia de prensa, el DT asumió la responsabilidad por el empate que dejó prácticamente sin título a Colo Colo y sobre su futuro no quiso decir nada, aunque su continuidad es muy poco probable.