Cristiano Ronaldo no lo pudo pasar peor en el partido que Portugal empató sin goles ante Austria. Si ya en la igualdad a un tanto ante Islandia se había llevado críticas por su escaso aporte, seguramente después del partido con los austríacos los cuestionamientos serán aún mayores.
Pese a que tuvo variadas ocasiones, el arquero de Austria evitó siempre su tanto y la opción más clara que tenía de batirlo fue cuando lo bajaron en el área y el árbitro no dudó en cobrar penal. Cuando quedaban muy pocos minutos de partido, los lusos tenían todas las de ganar en los pies de su astro, pero su remate dio en el vertical y el cero a cero se mantuvo hasta el pitazo final.
Una vez terminado el partido, la cara de CR7 decía todo y la frustración era el único sentimiento que podía sentir. Aunque la rabia lo invadía, el portugués se dio tiempo para tener un gran gesto con un hincha que entró a la cancha para conseguir una selfie.
Ilusionado con la posibilidad de fotografiarse con su ídolo, el fanático corrió hasta la mitad de cancha y se encontró con Cristiano Ronaldo, quien accedió a tomarse la instantánea. Sin embargo, el celular del hincha no respondía y los guardias llegaron hasta el lugar para echarlo, pero fue ahí cuando el jugador del Real Madrid tuvo un gran gesto y lo defendió para que pueda tener su selfie.
Cuando finalmente pudo conseguir su fotografía, el hincha no pudo contener las lágrimas y le agradeció al delantero la amabilidad que tuvo de esperarlo. Pese a que los hinchas terminaron sacándolo, CR7 tuvo un gran gesto en un momento que no lo estaba pasando bien.