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Rodrigo Realpe Varela.
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Mientras en la cancha la U intentaba romper el cero ante Emelec -finalmente cayó 1 a 0- en el estadio un sonido comenzó a generar murmullos entre el público presente ¿Había un bombo, acompañando el canto de los hinchas azules en el sector sur del Nacional?
Las dudas se disiparon en el entretiempo, cuando en un acto desafiante, algunos miembros de la barra alzaron el instrumento en señal de victoria.
La presencia del bombo dejó desconcertados a todos: Carabineros, Azul Azul y Estadio Seguro. Todos exigían respuestas con caras de incredulidad.
En las redes sociales, la presencia del bombo fue celebrada entre hinchas azules (lo mismo que las bengalas) como el “Día de la Astucia”.
Pero ¿cómo un bombo llegó a dar allí sin que Carabineros se percatase, siendo que el estadio fue inspeccionado horas antes del partido?
En conversación con El Gráfico Chile, desde la barra cuentan que el bombo habría sido ingresado sin la complicidad de Carabineros y sin la exigencia que se puede solicitar al club, que de todas formas habría sido rechazada por parte de Azul Azul.
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Este habría sido llevado por un gran número de personas a altas horas de la madrugada, evitando así cualquier confronte con las Fuerzas Especiales de Carabineros.
“Ellos saben cómo funciona esto. Las cosas entran de noche y el juego consiste en ocultarla y ellos deben hallarlas, sabemos que revisarán el estadio, pero esta vez fuimos más listos que ellos, en otras oportunidades perdimos importantes cantidades de artificio. Esta vez no. Fue una jornada redonda”, cuentan miembros de la barra. Lo de ayer fue un triunfo, paradojico considerando lo que pasó en la cancha.
Tras el partido, las caras en Azul Azul no eran de las mejores. El resultado, las bengalas y el bombo dejaron a la concesionaria en jaque y sin palabras.
“¿Carlos, cómo explica la presencia de un bombo en la barra?”, le consultaron al presidente de Azul Azul en camarines. El dirigente eludió la pregunta y se fue sin decir nada al respecto.
GRAF/DE
