El sol sobre la arena en una playa tropical y una pareja tomada de la mano, disfrutando el tiempo juntos y solo viviendo su amor. Así debería haber sido el viaje romántico que programó una pareja de jóvenes canadienses, pero que terminó de la peor forma.
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Los protagonistas de esta historia, Katie Stephens y Eddie Zytner, disfrutaban de la arena Punta Cana, cuando comenzaron a sentir una picazón molesta en sus pies.
“Descubrí que estábamos rascándonos los pies un poco”, dijo la joven sobre el inicio del calvario que vendría después.
En un comienzo la pareja pensó que se trataba de pulgas de mar pero una vez que regresaron a Canadá la piel de sus pies comenzó a mostrar pequeños bultos entre sus dedos.
Con el paso de los días y con la hinchazón que no pasaba concurrieron a un recinto asistencial donde los médicos se quedaron perplejos frenarte a los que observaron.
Luego de ser revisados por dos especialistas, un tercero finalmente recordó que había visto un caso similar en un turista que había visitado Tailandia.
A través de su página de Facebook el novio explicó que habían sido contaminados por una larva en su paseo por la playa.