Hace cinco años se estrenó en Netflix la serie Stranger Things y tras su éxito en la plataforma de streaming, con sus primeras tres temporadas, es que la cuarta entrega ha sido una de las más esperadas por los suscriptores de la App.
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Con una fecha de estreno aún sin definir, cualquier aporte que sus protagonistas entreguen respecto de la trama de esta nueva temporada dan que hablar. Como las pistas que dio el actor Caleb McLaughlin en Complex.
El joven que interpreta a Lucas en la serie de ficción reveló que la próxima entrega llegará con varios cambios respecto de las temporadas anteriores, que mostrará a los protagonistas más maduro de cuando iniciaron la saga siendo unos niños.
«Estoy emocionado de que la gente vea la temporada. Lo hemos estado filmando ahora mismo durante el último año y medio, dos años debido al covid-19. Estoy muy emocionado de que todos vean la temporada porque será diferente a las últimas temporadas», reconoció McLaughlin, que apuesta por una trama que cautivará a sus seguidores.
«Las historias son una locura. Va a ser muy emocionante ver qué piensa la gente sobre esto. Mientras hablo de esto, pienso en lo que hemos estado filmando y pienso, ‘Wow. Nadie sabe lo que vendrá. Es una locura'».
Las grabaciones de Stranger Things en pandemia
El largo proceso de grabación, debido a la contingencia de la pandemia, es un tema que el actor asume ha generado mayor ansiedad entre los actores y ha sumado mayor interés en el público.
«El año pasado, cuando volvimos, definitivamente fue todo un desafío. Nos separamos. Ni siquiera podríamos estar juntos durante un cierto período de tiempo, solo cuando estamos filmando. Tuvimos que mantener nuestras máscaras puestas. Quiero decir, todavía uso mi máscara, así que eso realmente no fue un problema», explicó.
Con todo, asume que tras el paso de los días de grabaciones, la nueva realidad pandémica la asumieron sin mayores problemas. «Por lo general, podíamos almorzar juntos y no podíamos almorzar juntos. Cuando estábamos sentados junto a nuestras sillas estábamos sentados en estos pequeños cubículos separados unos de otros. Así que fue muy interesante, pero ahora las cosas se han levantado un poco más. Realmente se trata de seguir usando nuestra máscara y permanecer a dos metros el uno del otro, pero no es tan malo. Me estoy acostumbrando. Entonces, puede que no haya habido una diferencia, pero me estoy acostumbrando a toda la situación del covid-19 y al distanciamiento social».