La editorial HarperCollins decidió finalmente demandar a la actriz Lindsay Lohan por no cumplir con los términos del contrato que firmaron ambas partes en el año 2014 para la futura publicación de un libro autobiográfico de la estrella que, como ha quedado patente con el paso de los años, nunca ha visto la luz porque ni siquiera llegó a escribirse.
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Como ha revelado el portal de noticias TMZ, la compañía pagó 365.000 dólares por adelantado a la antigua estrella juvenil a cambio de que esta enviara periódicamente varios manuscritos con los que ir armando la obra. La propia intérprete se habría comprometido por escrito a finalizar el trabajo antes de mayo de 2015.
Tres años más tarde, HarperCollins informó oficialmente a Lindsay Lohan de que el acuerdo había sido cancelado como consecuencia de su inacción, ya que esta no facilitó en ningún momento texto alguno con el que ir desarrollando la obra y, por tanto, satisfacer sus obligaciones contractuales.
Ahora, la firma fue un paso más allá a la hora de recibir las compensaciones derivadas de semejante incumplimiento, llevando a la artista a los tribunales para que le sean devueltos los 365.000 dólares, así como para que Lindsay abone las correspondientes tasas legales y los intereses ligados al mencionado pago.
Según los documentos que están en poder del citado medio, HarperCollins se habría puesto en contacto con los representantes de la actriz, en repetidas ocasiones y durante casi cuatro años, para que esta retornara esos más de 300.000 dólares que le fueron entregados, a lo que ella se habría negado rotundamente.
