Como muchos recordarán, este año la señal del grupo Bethia emitió un video errado en el marco del Día Internacional de la Mujer. Y es que Mega transmitió «en vivo» disturbios relacionados a la conmemoración del 8M. Sin embargo, aquella manifestación no existía, y el video correspondía a desmanes anteriores.
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Tras este grosso error, la estación privada optó por desvincular al subeditor de prensa que en aquel momento habría estado encargo de chequear dicha información.
Se trató de Juan Lanata, periodista despedido bajo el artículo 160 del Código del Trabajo, que alude al “incumplimiento grave de las obligaciones de su contrato”.
En este contexto, el profesional inició una batalla legal en contra de Mega. Litigio donde logró comprobar que sí cumplió con sus tareas designadas.
De acuerdo a la resolución del tribunal, Lanata “recibió órdenes de su superior. No tenía conocimiento de que las imágenes publicadas no correspondían a la realidad que se pretendía informar”, indica el documento legal.
Por esta razón, el profesional llegó a un acuerdo con su otrora casa televisiva. Con el fin de poner fin al juicio, Mega acordó pagar 12 millones de pesos al afectado. Modificando su despido bajo el artículo 159 Nº1 del Código del Trabajo sobre mutuo acuerdo entre las partes.
