Un tribunal de Los Ángeles, en Estados Unidos, halló culpable ayer lunes a la artista pop Katy Perry por violación de derechos de autor. La sala compuesta por nueve miembros, afirmó que hay similitudes entre la popular canción de la californiana y el tema «Joyful Noise» del rapero cristiano Marcus Gray conocido como «Flame».
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En el juicio, Perry, declaró como testigo y afirmó al jurado que su canción era una composición original y que jamás había escuchado el tema del denunciante. En tanto, aclaró que que sus colaboradores le habían mostrado breves pasajes instrumentales los cuales inspiraron a «Dark Horse». Mientras el equipo de la cantante comentó que las bases de las composiciones eran «comunes» y que no podían ajustarse a los derechos de autor.
Por otra parte, los abogados de Marcus Gray, sostuvieron que Perry utilizó «una parte importante» de la composición de su defendido, centrándose en una parte que dura 16 segundos.
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Uno de los momentos más llamativos del juicio que duró una semana, Perry, se ofreció a cantar «a capella» su cuestionada canción ya que los parlantes de la corte federal tuvieron un inconveniente y generó las risas incluso de los jueces. Respecto al monto que Katy deberá pagar como indemnización, la corte, lo determinará en la jornada de hoy martes.
La canción de la polémica es un híbrido entre pop, trap y hip hop, fue el tercer sencillo del disco «Prism» de Perry de 2013 el cual pasó cuatro semanas en la cima de la lista Hot 100 de Billboard, a inicios de 2014. Además le valió una nominación al Grammy.
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Cabe recordar que la artista presentó «Dark Horse» en un exitoso show de entretiempo en el «Super Bowl» 2015, en una performance que fue sumamente alabada por su pirotecnia.
