Impacto provoco esta semana que tres mujeres acusaran a Tito Fernández de realizar “sacrificios sexuales” en una secta llamada “Tallis”entre 2009 y 2010.
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En su relato las víctimas declararon haber sido manipuladas por el cantante, quien habría aprovechado su condición de “maestro espiritual” para violarlas. Sin dudas este fue un remezón para el conocido “Temucano”, quien ahora debe enfrentar a la justicia.
Fue en este contexto que “La Mañana” de Chilevisión decidió entrevistar a la segunda esposa del cantautor, Lu Rivera, instancia en que la mujer realizó duros descargos en contra de las denunciantes.
La también cantante comenzó su relato asegurando que siente “un dolor terrible. Es espantoso cuando se culpa a una persona de algo que no ha hecho”.
“Me muero por decirte todo lo que sé (…) Pero no puedo, lo único que te puedo decir es que no existe una secta, jamás existió. Mi marido no lidera ninguna”, dijo Rivera, aclarando que ni ella ni Fernández se pueden referir aún al tema debido al proceso judicial que se encuentra en curso.
Ante ello, el abogado Daniel Stingo rebatió lo dicho por la esposa del “Temucano”, afirmando que ambos pueden hablar del tema pues no existe una orden del tribunal que lo prohiba.
No obstante, la conversación continuó. Rivera apunto a que las denunciantes «están amparadas por toda la prensa. Ha sido muy fácil para ellas, que están viviendo sus 15 minutos de fama. Que los disfruten, porque cuando mi esposo hable, las cosas van a cambiar».
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«Ellas de víctimas no tienen nada. Si Tito tuviera ese poder, yo no estaría hablando ahora, estaría sometida aquí, calladita porque mi marido se puede enojar», indicó en vivo la mujer.
Asimismo explicó que posee la carpeta de la investigación, en donde las declaraciones de las mujeres “se caen a pedazos”.
Relación consensuada
Durante su entrevista en el matinal, la esposa de Tito Fernández recalcó que «mi marido estaba en franca decaída en el aspecto sexual e intentó probar algunas cosas. Habló con las señoritas y ellas aceptaron«, agregando que «siempre supe que había ido con las tres a un motel”.
Y recalcó: «con mi esposo lo hablamos en ese momento, yo detecté ese problema. Tenemos un matrimonio muy amalgamado, somos un bloque y hablamos de todo. Tenemos una mentalidad bastante abierta. Sabía perfectamente que no iba a cometer una violación, él iba a tener relaciones sexuales».
“Ellas pueden decir lo que quieran. Si yo supiera, hubiera intuido, hubiera tenido un conocimiento de que Tito antes violó a alguien, tú en este momento estarías hablando con la ex mujer de Tito Fernández. Yo no vivo con un violador, ni menos insulten mi inteligencia. Yo soy una mujer bastante apta para saber con quién vivo”, sentenció.
Sobre las posteriores denuncias explicó que “hablé con una de ellas. Ellas tuvieron una actitud bastante ladina, hicieron esto en forma muy solapada. Todavía no entiendo el por qué, porque ellas venían muchísimo a mi casa, especialmente una de ellas que andaba siempre en bicicleta. Y entraba, estaba en el estudio con mi marido, estaba con su pololo también (…) Y a mí me parece muy raro porque era muy amable, incluso ella asistía a eventos donde estaba mi marido”.